Tenía 113 años. La noticia la comunicó el alcalde de Badajoz, donde vivía el anciano.
El hombre más longevo del mundo, Francisco Núñez Olivera, falleció a los 113 años en su casa de la localidad española de Bienvenida (Badajoz, suroeste), municipio donde hoy será enterrado.
El anciano falleció anoche en su hogar, junto a su hija Antonia, de 82 años, confirmó hoy a Efe el alcalde de su localidad, quien manifestó que “es una pena para todo el pueblo y todo el mundo”.