Se suicidó cuando las autoridades intentaban detenerlo. Había puesto unas 5 bombas en tres semanas, matando a dos personas e hiriendo a otras cinco.
El jefe de la Policía de Austin, Brian Manley, informó este miércoles que el principal sospechoso de los atentados con paquetes bomba en la capital de Texas se suicidó volándose por los aires cuando las autoridades intentaban detenerlo.
Poco antes una periodista de la emisora local KVUE había informado que el FBI había detenido a un sospechoso. En la operación se escucharon disparos y una explosión, añadió.
La misteriosa serie de bombas, que dejó dos muertos y varios heridos, tenía a la capital de Texas y a sus autoridades en tensión desde principios de marzo.
La última bomba estalló el martes en una oficina de FedEx en San Antonio. Estaba en un paquete con destino a Austin. La explosión dejó un herido.
El resto de las bombas habían sido enviadas por correo a diversas casas y otra estalló controlada a distancia en una calle de Austin, al paso de dos personas.
El lunes la policía había confirmado que se estaba ante un atacante serial, pero no había indicios de estar de cerca de atrapar a un sospechoso.