En esta jornada los católicos celebran el inicio de la Semana Santa con el Domingo de Ramos y además coincide con el Día del Niño por Nacer. “El sentido es que esos ramos puedan ser agitados para aclamar la vida”, sostuvieron los obispos al ofrecer sugerencias para esta fecha religiosa.
El presbítero Sergio Capoccetti presidió las celebraciones y bendiciones de las mujeres embarazadas en capillas de nuestra ciudad, colonias aledañas, como así también el Santuario San Francisco Javier.
La Comisión Episcopal de Comunicación y la Comisión Episcopal de Laicos y Familia (Celaf) propuso un signo nacional para clamar “Vale toda vida”” el 25 de marzo, Domingo de Ramos, en el que la grey católica comienza a celebrar la Semana Santa.
“Damos comienzo a la semana donde contemplamos el misterio de la Vida Plena manifestado en Cristo Resucitado. Somos llamados a participar de este misterio y a comprometernos con él. Con tal motivo invitamos a toda la comunidad eclesial a unirnos especialmente en la procesión de los ramos, llevando adelante juntos un gesto que exprese nuestro anhelo de cuidar y respetar la vida como un don”, subrayaron en la convocatoria.
“Proponemos un signo a nivel nacional: preparar los ramos que usaremos en nuestras celebraciones uniendo a ellos la siguiente frase impresa: ‘Vale toda vida. El sentido es que esos ramos puedan ser agitados para aclamar la vida. Y entrar en la Semana Santa unidos al Señor”, agregaron.
Tras recordar que este domingo también se celebra el Día del Niño por Nacer, destacaron que “muchos participarán de diversas marchas organizadas por grupos de laicos que invitan a expresar la defensa de la vida por nacer”.
“Acompañamos a quienes participan y que utilizan el derecho a la libertad de expresión propio de la democracia y anhelamos que esta y otras manifestaciones las vivamos como una oportunidad y seamos así, como dice el papa Francisco: ‘canales del bien y de la belleza, para que puedan hacer su aporte en la defensa de la vida y la justicia”, pidieron.
ARANCEDO: “SEMANA SANTA, UN MOMENTO ÚNICO DE RENOVACIÓN”
El arzobispo de Santa Fe de la Vera Cruz, monseñor José María Arancedo, consideró que el Domingo de Ramos es un día en el que los cristianos deben disponerse “a acompañar al Señor en las diversas celebraciones de la Semana Santa, para participar con Él y la Iglesia de la alegría de la Pascua”.
“Es un día que participa mucha gente y lo hace con sinceridad y sentido religioso, pero no siempre se los ve a lo largo de la Semana. Es una lástima, parecería que nos quedamos en la puerta de un camino en el que el Señor nos espera”, lamentó.
El prelado sostuvo que “la vida cristiana tiene, en la participación de la Semana Santa, un momento único de renovación”, por lo que invitó a “conocer los horarios de sus comunidades parroquiales para encontrarse con el Señor y acompañarlo”.
“Ha habido grandes conversiones en la historia que se dieron, precisamente, en estos días”, recordó.
“¡Hosanna! ¡Bendito es el que viene en nombre del Señor! ¡Bendito sea el Reino que ya viene, el Reino de nuestro padre David! Esta alegría sincera y esperanzada del pueblo que lo recibe, adquiere un significado especial cuando lo vemos ingresar montado sobre un asno”, indicó.
Monseñor Arancedo explicó que “esta sencillez da sentido a su reinado, así lo vemos cuando le responde a Pilato: ‘Mi realeza no es de este mundo. ¿Entonces tú eres rey? Jesús respondió: Tú lo dices: yo soy rey. Para esto he nacido y he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. El que es de la verdad, escucha mi voz’”.
“La fuerza del Reino de Dios es el amor y la verdad, sus armas la fe y la humildad, la honestidad y el servicio. A esta fuente del Reino de Dios, que es Jesucristo, celebramos en Semana Santa”, concluyó.
FUENTE: AICA – Radio Eme San Javier