Tucumán –
Con un disparo en la nunca, el cuerpo de un niño quedó tendido esta madrugada sobre el pavimento. En avenida Avellaneda y pasaje Río de Janeiro hubo un supuesto tiroteo con la Policía que acabó con la vida de Facundo Burgos, de 11 años, que habría recibido un disparo desde una de las patrullas que los perseguían desde el parque 9 de Julio.
Según informaron fuentes policiales, dos motoristas del 911 se cruzaron con tres motos en avenida Benjamín Aráoz. Al intentar darles la voz de alto, los seis jóvenes emprendieron la fuga hacia la zona de El Bajo.
Siempre siguiendo con los dichos de la Policía, al llegar a la vieja terminal comenzó un intercambio de disparos. Luego de cruzar la calle Francia, dos menores cayeron heridos de una de las motos, a metros de la esquina de Avellaneda y Río de Janeiro.
Burgos fue trasladado al hospital Padilla, en donde perdió la vida y se constató que había sufrido una herida de bala en la zona de la nuca. El otro menor, de 14 años, que conducía la moto, fue rozado por un proyectil en la cabeza, pero está fuera de peligro. En el transcurso de la mañana será entregado a sus padres.
La fiscala Adriana Giannoni en un primer momento no había tomado medidas privativas de la libertad contra los dos policías. Sin embargo, unas horas más tarde solicitó que se secuestren las armas reglamentarias.
Para que la etapa de instrucción tenga mayor transparencia, el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) se encargará de la investigación. En el lugar habrían encontrado vainas servidas de dos armas: una de 9 milímetros y otra de calibre 22.
