Miles de novios buscan la fórmula para ahorrar algunos pesos a la hora de celebrar la boda y hasta para la luna de miel.
Todos son conscientes de que planificar la unión de dos personas conlleva dinero, tiempo y esfuerzo. Se trata del día más especial para los novios, pero hay que tomar las decisiones más apropiadas, especialmente si el presupuesto disponible no es muy generoso.
Hay que celebrarlo, pero adquirir una gran deuda para sonreír solamente durante algunas horas no tiene mucho sentido, ya que hay formas más sencillas de resolver la situación y, al mismo tiempo, disfrutar de un día inolvidable.
Los consejos pueden abarcar diversos aspectos, como el banquete a servir o las bebidas a consumir.
Una sugerencia es celebrar el evento un viernes por la noche o un domingo. Por lo general, el precio de los salones de fiesta o de los jardines es hasta un 20% más barato en comparación a si se realiza la fiesta en sábado.
No hay más remedio que excluir a los amigos que no sean muy cercanos y a aquellos con los que se ha perdido el contacto. Si los compañeros de trabajo son muchos, entonces no podrán asistir. Ellos lo entenderán.
Comida y bebidas
En cuanto al banquete, hay que elegir comida de temporada sin caer en las extravagancias, que por lo general resulta hasta un 20% más cara. Que el banquete sea sencillo, pero sabroso. Tampoco sería mala idea eliminar un plato del menú.
Respecto al alcohol, hay que suministrar lo básico. Si hay diferentes opciones, entonces habrá que comprar más botellas. Para estos casos pueden funcionar el vino tinto, el blanco, ron, whisky y el tequila.
Todas las bodas necesitan contar con un registro fotográfico. Al contratar al fotógrafo no hay que pedir el paquete más grande, solo el básico. También puede ayudar que los invitados hagan fotos y luego las compartan.
La música es la que se encargará de animar la fiesta. Contratar un grupo musical puede resultar muy caro, por lo que es mejor llamar a un DJ, que será más económico. Un DJ bueno puede mantener el ambiente festivo durante toda la noche.
También hay formas de ahorrar a la hora de elaborar las invitaciones. En este punto no hay que escatimar demasiado, sólo debe fijarse un presupuesto real y razonable. Lo importante es que las invitaciones reflejen el estilo que se desea.
Los sobres gigantes y el papel hecho a mano no son necesarios. Si lo que se busca es una invitación bonita pero barata, se puede tomar esta recomendación: sobre, grabado y celofán. Al estar juntos los 3 elementos es posible reducir el precio hasta en un 30%.
A pesar de todas las previsiones que se puedan tomar, es posible que surjan imprevistos o gastos adicionales que no estaban en la cuenta. Para cumplir con ellos y seguir adelante con los preparativos, muchos optan por los préstamos rápidos y online o los microcréditos.
En páginas como mycredit.com.ar se puede solicitar un préstamo personal de este tipo y no aplazar la fecha de la boda ni la fiesta.
La novia y el novio
En la pareja también hay formas de ahorrar dinero. En cuanto a la novia, puede optar por contratar el maquillaje y el peinado con una estilista de confianza. Lo más habitual es contar con el servicio de una persona que se ocupe siempre de sus tratamientos de belleza.
El vestido debe ser especial, pero no necesariamente el más caro. La novia tiene que encontrar un vestido que realmente le guste y vaya con su estilo.
El novio tiene la opción de alquilar el traje. Respecto a los zapatos, estaría bien comprar unos que también sirvieran para otro tipo de ocasiones.
Hacer las cosas con el suficiente tiempo de antelación será una forma inteligente de ahorrar algunos pesos. Contratando el salón varios meses antes se puede ahorrar un buen dinero. Lo mismo ocurre con otros servicios, como es el caso del fotógrafo, la limusina o las invitaciones.
Una técnica muy aceptada es comprar una botella de alcohol cada 15 días, o una mensual entre toda la familia. La intención es que todos colaboren y que el gasto no sea tan grande como si se hiciera de una sola vez.
En la decoración se puede optar por realizar por cuenta propia los centros de flores, siempre que el tiempo lo permita. Sólo hay que efectuar el pedido a la florería, recogerlas el día anterior y elaborar los arreglos a tiempo para el banquete.
En líneas generales, hay múltiples maneras de ahorrar dinero a la hora de celebrar una boda. La palabra clave es la planificación y saber dar prioridad a las cosas que realmente importan a la pareja.
