En otra jornada marcada por la suba de la tasa de Lebac, la moneda estadounidense marcó un nuevo máximo histórico.
El dólar cerró este jueves a $20,84 para la venta en bancos y casas de cambio de la city porteña, un nuevo máximo histórico. La moneda estadounidense creció 29 centavos a pesar de que el Banco Central de la República Argentina vendió 853 millones de dólares para contener la escalada de la cotización. El incremento en la tasa de Lebac, que en el mercado secundario se llegaron a operar a un 29% en su versión de corto plazo, tampoco alcanzó a satisfacer la demanda.
La entidad que conduce Federico Sturzenegger vendió 2.324 millones de dólares entre la jornada de ayer, cuando la cotización creció cinco centavos, y hoy. El BCRA lleva gastados US$ 5.353 millones entre marzo y abril para evitar que el billete verde llegue a los $21 y la disparada se traslada a la inflación, otro de los objetivos complicados para el Gobierno de Mauricio Macri en 2018.
Desde el Ejecutivo, no obstante, se muestran tranquilos y señalan que se trata de movimientos lógicos para un mercado libre de divisas. “Lo que está pasando es normal en un contexto de flotación libre”, justificó Lucio Castro, secretario de Innovación Tecnológica, durante la presentación del Monitor de la Economía Real del último bimestre.
Frente a la repregunta respecto de cuán libre era la flotación, dadas las reiteradas intervenciones del Banco Central, el funcionario afirmó que “es lo que se hace en todos los países donde funciona este tipo de sistemas”.
La analista Elisabet Bacigalupo, de Abeceb, explicó a PERFIL que esta nueva suba del dólar estuvo alimentada por dos motivos: en primer lugar, que esta semana empezó a regir el gravamen a la renta financiera de inversores extranjeros, por lo que muchos fondos vendieron Lebac y se fueron al dólar. En segundo término, porque hubo un aumento de tasas en Estados Unidos. “Las políticas zigzagueantes del Banco Central, a veces, no ayudan”, comentó la economista.
Bacigalupo explicó que la situación de las reservas del Banco Central es sólida y que no debería haber problemas en intervenir, siempre y cuando estas operaciones estén en el marco de medidas “transitorias”.
El especialista en comercio internacional Marcelo Elizondo, señaló: “Creo que hoy, en el Gobierno, la principal preocupación está en que el tipo de cambio no dispare la inflación, más que en ganar competitividad comercial por la depreciación de la moneda”.