Natacha Jaitt habló de una serie de supuestos abusos sexuales e involucró a algunos de los detenidos.
Natacha Jaitt se presentó ayer en la fiscalía de Avellaneda, donde se investigan los abusos contra, al menos nueve, futbolistas de las divisiones inferiores de Independiente y declaró como testigo hasta pasadas las 22.
Según fuentes judiciales, durante las cuatro horas que duró su declaración, que se realizó en un total hermetismo, la mujer se refirió a una serie de supuestos hechos de abuso sexual contra menores futbolistas de los que había tomado conocimiento.
En su relato, mencionó como presuntos responsables de esas agresiones sexuales a algunos de los cinco sospechosos detenidos: el relacionista público, Leonardo Cohen Arazi; el árbitro, Martín Bustos; el organizador de torneo de fútbol juvenil Juan Manuel Díaz Vallone; el empleado de supermercado, Silvio Fleyta y el administrador de consorcios, Alejandro Carlos Dal Cin.
A pedido de la testigo, la convocatoria a Jaitt se había mantenido en reserva. La de anoche, fue la tercera oportunidad en que había sido citada. No se había presentado en las otras dos ocasiones. En la última convocatoria del viernes pasado dijo que había faltado debido a una amenaza de muerte que había recibido a través de la red social Instagram.
Al finalizar su declaración manifestó que contaba con documentación para probar lo que había dicho y que aportaría las pruebas en los próximos días.
La declaración fue interrumpida después de cuatro horas a pedido de uno de los abogados defensores y continuará en una fecha que deberá designar la fiscalía.
La investigación por los abusos sexuales contra jugadores juveniles de la divisiones inferiores de Independiente comenzó hace tres semanas, cuando la fiscal María Soledad Garibaldi recibió la denuncia de los responsables de la pensión del mencionado club, en la que se referían a la declaración de uno de los futbolistas que aportó cuatro números de teléfonos de hombres que les pagaban a los menores para que tuvieran sexo con adultos.