El presidente chileno , Sebastián Piñera , llegará hoy a la tarde a la Argentina para iniciar la primera gira internacional de su segundo mandato. Será un viaje estratégico que lo reunirá con Mauricio Macri , y donde ambos discutirán una nutrida agenda de quince puntos entre los dos países, que incluirá aspectos relevantes como integración, turismo y energía.
Sin embargo, y desde su propio país, el recorrido del mandatario no comenzó muy tranquilo y Piñera se encontró con un impensado primer obstáculo: la polémica generada por la designación de su hermano Pablo como embajador de la Argentina. Aquello le valió durísimas críticas de toda la oposición en la antesala del viaje y acusaciones directas de nepotismo, que el propio Piñera se encargó de desestimar.
“Yo quiero decirles a mis compatriotas que aquí no ha habido ningún acto de nepotismo. Yo no he nombrado a Pablo Piñera embajador por ser mi hermano. Lo he nombrado porque estoy convencido de que reúne todos los requisitos”, dijo el presidente chileno.
Los cuestionamientos alcanzaron su mayor intensidad a horas de iniciar la gira, cuando diputados de la bancada del Partido Socialista y Partido Comunista recurrieron a la Contraloría General de la República para que el organismo revisara la designación.
“Este acto es prohibido expresamente en el artículo 8 de la Constitución, donde se impide la designación en cargos de responsabilidad pública a familiares directos. Además, en la ley general de bases de la administración del Estado en su artículo 52, se especifica que la inhabilidad para nombramientos llega hasta los sobrinos”, explicó en conversación con LA NACION el diputado socialista Leonardo Soto, y que fue uno de los legisladores que presentó el recurso.
“Estos aspectos nos dan argumentos para señalar que esta designación es ilegal. Esto es un bochorno internacional para nuestro país, sobre todo porque hay un acto claro de nepotismo que es el germen de la corrupción. La Contraloría puede y debe adoptar la decisión de invalidar esa designación en virtud del principio de la probidad en la administración pública y ha quedado en evidencia que lo que se dice en campaña no cuesta nada olvidarlo. El presidente predicó que en su gobierno iba a primar el mérito y la capacidad”, agregó el parlamentario.
Durante la tarde, Piñera retrocedió ante la coyuntura y le puso un freno al nombramiento de su familiar, un economista de 67 años, de perfil neutral y que incluso integró los gobiernos de Patricio Aylwin y Michelle Bachelet .
“Como es de público conocimiento, algunos parlamentarios de oposición han presentado un requerimiento ante la Contraloría General de la República respecto de este nombramiento. En consecuencia, y por respeto a la institucionalidad vigente, me parece prudente esperar el pronunciamiento de la Contraloría frente al requerimiento antes mencionado, antes de proseguir con la implementación de este nombramiento”, rezó la nota firmada por el presidente.
En una situación que algunos analistas han denominado como un “gol en contra” de La Moneda, desde los partidos oficialistas el apoyo al presidente chileno no tardó en llegar.
“Para mí el nepotismo se produce cuando se designa a una persona que no tiene ninguna calificación para hacerlo, más que ser familiar. Ahora si la persona tiene todas las condiciones para asumir el cargo, eso no es nepotismo”, comentó Andrés Allamand, senador de Renovación Nacional y exministro de Defensa del primer gobierno de Piñera.
Jacqueline Van Rysselberghe, presidenta de la Unión Demócrata Independiente, también expresó su apoyo. “Es un aprovechamiento que hace la Nueva Mayoría, quienes van a criticar al presidente sin importar lo que haga. Esa es la postura que ha tomado la parte más dura de la izquierda”.