Personal policial del puesto caminero Nº 10, ubicado sobre la RN 34, a la altura de Palo Negro, departamento Rivadavia, en Santiago del Estero a pocos kilómetros del limite interprovincial con Santa Fe, detuvo la marcha de un colectivo que viajaba de norte a sur que había partido desde Aguas Blancas, Salta, y se dirigía hacia Buenos Aires. En el transporte solo viajaban 31 pasajeros, mientras que el resto del espacio estaba colmado de bultos con mercadería, al igual que en las bodegas.
A los pocos minutos, los uniformados interceptaron otro rodado similar en el que circulaban similar cantidad de pasajeros y también transportaban gran cantidad de mercadería en los asientos y pasillos. La procedencia y el destino era el mismo que el primer colectivo.
Los efectivos solicitaron la documentación que acreditara la pertenencia y procedencia de las prendas de vestir, calzados y artículos de tienda, aunque ninguno de los conductores ni los pasajeros la portaban. Todo hacía presumir que la mercadería había ingresado de contrabando desde Bolivia, por lo que se informó del procedimiento al juez federal, Dr. Guillermo Molinari.
El magistrado ordenó que personal del Escuadrón 59 de Gendarmería Nacional se hiciera cargo del secuestro y del procedimiento para este tipo de casos. En este sentido, fuentes del operativo indicaron que la mercadería estaría valuada en más de dos millones de pesos.