Durante un allanamiento este martes a una vivienda en el B° Nueva Pompeya, detuvieron a “El Rosarino”. Le secuestraron tres armas de fuego, una de ellas de guerra, cargadas con balas y cartuchos y en óptimas condiciones de funcionamiento.
Con las primeras luces del amanecer de este martes fue aprehendido durante un allanamiento en una vivienda ubicada sobre avenida Facundo Zuviría al 7800, en el barrio Nueva Pompeya de la capital santafesina, un hombre de 37 años, identificado como R.L.P. y conocido por el apodo del “El Rosarino”. Le secuestraron tres armas de fuego, siendo una de ellas de guerra, con abundante cantidad de balas y de cartuchos. Pesquisas de la PDI investigaron el caso y el allanamiento tuvo la colaboración del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) de la policía capitalina.
Materia investigada
Cuando promediaba abril, un vecino del barrio Nueva Pompeya fue interceptado en la esquina de Pasaje sin Nombre y Azcuénaga, y fue objeto de una brutal agresión por parte de dos hombres, los que a su vez serían padre e hijo. Terminaron la faena criminal con un disparo que impactó a la víctima en la zona intercostal.
La investigación que ejecutaron los pesquisas de la PDI, en consonancia con el fiscal de Homicidios del MPA, Andrés Marchi, también incluiría la participación del hombre aprehendido, en otro grave delito contra las personas que lo tiene como partícipe o autor.
Cuando el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) rodeó la vivienda de avenida Facundo Zuviría al 7800 casi Larrea, R.L.P. supo que no tenía escape. Los policías irrumpieron en la vivienda, lo neutralizaron, lo esposaron y lo dejaron sentado en una silla con una férrea custodia.
Luego, vino la requisa generalizada que hicieron los pesquisas de la PDI en cada una de las dependencias del inmueble, y así fue como secuestraron un revólver calibre 32 marca Doberman cargado con cuatro balas; una escopeta calibre 16 con 25 cartuchos y un revólver calibre 38 con seis balas, todas en óptimas condiciones de conservación, mantenimiento y funcionamiento.
Informaron la novedad sobre el resultado del procedimiento a la jefatura de la Policía de Investigaciones (PDI) y estos hicieron lo propio con el fiscal de Homicidios, Sergio Marchi, quien ordenó que continuara privado de su libertad, que sea identificado y que se le forme causa por ahora como presunto autor de los delitos de “tenencia indebida de arma de fuego de guerra y tenencia indebida de arma de fuego de uso civil”.
