El día en que muchos amanecen rezongando por el inicio de laboral y con la promesa de empezar la dieta. En algún momento del día, o de la semana, la restricción se rompe y desencadena una nueva frustración. Y a esperar al próximo lunes para volver a intentarlo.
Vivir a dieta o vivir pretendiendo arrancarla algún día no conduce a resultados positivos perdurables en el tiempo. Lo ideal es mantener hábitos alimenticios saludables durante toda la vida, sostiene la nutricionista Laura Romano, directora de Integral Nutrición, que ofrece cinco claves para entender de qué se trata y cómo lograrlo.
✔️ No vivir a dieta
Mantener un hábito saludable de por vida no significa dejar de comer las cosas que nos gustan y vivir a dieta. Mantener un hábito saludable significa hacer eso la mayor parte del tiempo, pero no todo el tiempo, como proponen las dietas. Justamente por eso las dietas no se sostienen de por vida.
Las dietas tienen como objetivo un descenso rápido de peso, pero no un cambio perdurable.
Las dietas se basan en la restricción, las dietas excluyen los alimentos que nos gustan, las dietas tienen como objetivo un rápido descenso de peso pero no un cambio para siempre. Es por eso que cuánto más estrictas son, más rápido se abandonan y, por ende, más rápido se recupera el peso perdido.
✔️ Disfrutar de la comida
Mantener un hábito saludable tiene que ver con disfrutar de la comida, y entender que eso no es un pecado. Disfrutar de las comidas y tener preferencias por ciertos alimentos es parte de nuestra esencia como seres humanos. Porque no comemos sólo para nutrirnos. Si comiéramos sólo para nutrirnos, comeríamos alimento balanceado. Los seres humanos comemos culturalmente, socialmente y hasta emocionalmente.
Los gustos deben estar contemplados en el marco de una alimentación saludable.
✔️ Alimentación equilibrada (y un gustito de vez en cuando)
Mantener un hábito saludable significa aprender a elegir en calidad y cantidad los alimentos que van a formar parte de nuestra rutina, de nuestro hábito. Significa elegir la mayor parte del tiempo una alimentación equilibrada con frutas, verduras, carnes magras, lácteos descremados, etc., pero dejar también un porcentaje menor para aquellas comidas que nos gustan, que nos hacen felices, es decir, darnos un gustito de vez en cuando.
Comer en forma moderada, balanceada y equilibrada es el objetivo.
✔️ No caer en el todo o nada
Mantener un hábito saludable implica no sentirse culpable por comer de vez en cuando comidas que nos gustan, justamente porque esa no es la conducta que se elige habitualmente. Porque no se cae en los extremos del “todo o nada” pasando períodos de dieta estricta seguidos de períodos de descontrol. Porque se aprende a vivir de forma moderada, balanceada y equilibrada