Hace muchísimo tiempo que la mafia de los taxis opera en la terminal de ómnibus de Rosario, mafiosa cooperativa en contra de los propios trabajadores taxistas que no pueden parar a levantar pasajeros en las dos paradas que tiene la terminal, y mafiosos para con los pasajeros.
Si un pasajero va cerca en muchos casos lo descartan y lo hacen esperar, te estafan con el marcador de tarifa en varias unidades, si se dan cuenta que los pasajeros no son de Rosario intentan alargar el recorrido, dan dinero falso, en definitiva son delincuentes al volante de un servicio público.
Lo que marca un pico mediático de momento es lo ocurrido con un taxista que se negó a retirarse de la parada y se quedó a levantar un viaje, lo agredieron y lo amenazaron, todo fue filmado y expuesto en redes sociales y medios de comunicación.
El taxista luego declaró que más adelante lo persiguieron lo encerraron entre dos autos y al bajarse le pegaron un tiro en una pierna.
“Esto fue premeditado porque ya me habían dicho que iba a pasar. Me dijeron que si seguía yendo iban a tomar otras medidas”, aseguró la víctima.