Detienen fumigaciones ilegales en Marcelino Escalada, a pocos metros de donde viviera Diógenes Chapelet, fallecido el 8 de enero pasado afectado directamente por los agrotóxicos. En la localidad santafesina, a raíz de la lucha que vienen llevando sus familiares y vecinos, se consiguió una ordenanza que regula la aspersión de agroquímicos.
Sergio Chapelet, hijo de Don Diógenes, fue quien realizó la denuncia policial por la que se logró impedir que siguieran fumigando en la tarde de ayer, ya que en este caso lo hacían sin ningún tipo de control, recetas agronómicas, avisos ni equipos de seguridad. Por ello, el gobierno comunal de Escalada le impuso, a quien transgredía la norma vigente, una multa por valor similar a 1500 litros de gas-oil.
La causa quedó en manos del Dr. Persello, fiscal del MPA con sede en la ciudad de San Justo. Sin dudas es ésta una muy buena oportunidad para comenzar a aplicar el “nuevo pensamiento” que esgrime el Fiscal General Baclini quien en recientes declaraciones dijo que “los fiscales en este tipo de delitos no necesariamente tendrán que analizar si hay un daño en la salud (como podrían ser lesiones o la muerte de una persona) para que haya una investigación penal, ya que la afectación del medioambiente en un modo peligroso es suficiente para iniciarla”. En buena hora y felicitaciones a los ciudadanos valientes, ejemplos de lucha para los más de 300 pueblos fumigados santafesinos.
