El hecho ocurrió en Pasaje Magallanes 3800, en el corazón de Barrio Roma. El vecino en cuestión fue alarmado en la siesta del día de ayer por fuertes ruidos que venían de la vereda. Cuando salió se encontró con operarios de la empresa de gas que trabajaban en el retirado del medidor. Los trabajadores manifestaron que había una perdida y por eso estaban obligados a llevarse el medidor.
El hombre se excusó diciendo que en ningún momento fue avisado de tal hecho y que de ser así debían repararlo. Pese a estas explicaciones, se quedó sin medidor de gas.