Anotó 35 puntos y llevó a los Cavaliers, de visitante, al triunfo 87 a 79 sobre Boston. Con la serie liquidada 4-3, espera al ganador de Houston-Golden State, que este lunes dirimen el duelo del Oeste.
En otra noche conmovedora, LeBron James hizo lo que ya es costumbre: ser el dueño de Cleveland Cavaliers, creer en el triunfo incluso cuando sus compañeros parecían derrotados por Boston Celtics y liderarlos cuando renació la esperanza para coronar con un 87-79 la victoria en la serie por 4-3 en la final de la Conferencia Este. En suma, consiguió su octava participación consecutivas en las Finales de la NBA. Y con ello, les dio más crédito a aquellos análisis que lo ubican a la altura de la gran leyenda, Michael Jordan.
Jugó 81 partidos en una temporada regular complicada, en la que su equipo debió reinventarse para salir adelante. Tras esos cambios (la salida de Isaiah Thomas, la más conocida), los Cavaliers fueron más Deportivo LeBron que nunca. Así llegaron a los Playoffs. Así llegaron, después del 87 a 79 del domingo, a las Finales.
James, que pronto será agente libre, no descansó ni un solo segundo: estuvo en la cancha los 48 minutos del partido. No superó las cuatro decenas de puntos, como sí lo hizo en otros siete partidos de estos Playoffs, pero le alcanzó para redondear una tarea fantástica: 35 tantos (12-24 en tiros de campo, 3-8 en triples), 15 rebotes y 9 asistencias, además de 2 bloqueos, 4 faltas personales y 8 pérdidas. Titánico.
Aunque su aporte fue clave durante toda la eliminatoria, lo sucedido en el séptimo juego fue un paseo por todos los estados de ánimo del subcampeón. La desorientación del primer cuarto (12 puntos) y parte del segundo, la lucha férrea –punto a punto– con Boston y, entre los festejos de sus compañeros y el reconocimiento de sus rivales, la euforia del último período (tramo en el que también registró 12 tantos).
“Nuestro objetivo era hacerle perder tanta energía como fuese posible. Sin embargo, anotó 35 puntos. Es una broma”, se rindió Brad Stevens, entrenador de los Celtics.
Con el transcurso de los minutos, a LeBron lo acompañaron Jeff Green (19 puntos y 8 rebotes), Tristan Thompson (10 y 9) y JR Smith (12 unidades). Otro dato que tiraba para atrás en la previa del encuentro: la figura no pudo contar con su mejor socio, Kevin Love, que seguía conmocionado después de un golpe con Jayson Tatum en el sexto juego. Pero James siempre tira para adelante.
Los Celtics por momentos hicieron gala del juego de equipo que los llevó a esta instancia. Sobresalió Tatum, autor de 24 puntos y 7 recobres. Al Horford, en especial durante el primer tramo –cuando más sufrió Cleveland–, fue un arma esencial en la zona pintada y terminó con 17 tantos.
Ahora, Cleveland espera al ganador de la Conferencia Oeste para la serie decisiva, que arrancará el jueves. Desde las 22 de este lunes, Golden State –defensor del título– visitará a Houston Rockets, con la serie empatada 3-3.
