Cristiano Ronaldo es una estrella y como tal, se hizo escuchar en la noche de ayer en Kiev, en donde prefirió dejar a un lado la histórica victoria grupal que significó la tercera Champions League consecutiva, para hablar acerca de su futuro.
A lo largo del año el astro portugués padeció diversos episodios que lo hicieron estallar en este último partido de la temporada para el conjunto blanco. Entre ellos aparecen algunos nombres propios como Neymar y Lionel Messi.
CONTRATO
“Las cosas no se solucionan con dinero, tenía y tengo, no es un problema para mí”, aseguraba al salir del vestuario. Sin embargo, es un detalle en el que tendría que trabajar la directiva merengue, ya que existe un disgusto por la cifra.
Tras conquistar la Champions League del año pasado, Florentino Pérez le aseguró al luso que iba a haber una mejora en su contrato, el cual había firmado hacía apenas seis meses y alcanzaba los 26 millones de euros limpios.
Esa mejora nunca llegó y el jugador espera una oferta que ronde los 34 o 38 millones de dólares, más un bonus extra por premios como el Balón de Oro o la obtención de la futura Champions League.
NEYMAR Y LIONEL MESSI
La situación de los otros dos astros del fútbol también influye para Cristiano Ronaldo que, si siente que es el mejor jugador del mundo, debería cobrar como tal, y por el momento se sitúa en el tercer escalón salarial.
El crack argentino alcanzó un sueldo récord de 58 millones de dólares netos en su última renovación que lo vincula con el Barcelona hasta 2021.
A los números de Neymar, que recibe USD43 millones por año, se le sumó el interés del Real Madrid por él, por el cual los rumores indicaban que el club estaba dispuesto a pagarle un sueldo similar al que cobra en París, sin tener en cuenta en primer lugar las exigencias de Ronaldo.
HACIENDA
El problema con el presunto fraude fiscal que tiene en España también es un motivo para abandonar el club. Si bien el Real Madrid lo protege, el jugador no logra aclarar su situación en el país.
El astro luso estaría tratando de llegar a un pacto con las autoridades y, según fuentes cercanas a su caso, habría ofrecido pagar a la Hacienda española 14 millones de euros y declararse culpable de los cuatro delitos de los que se le acusa. Públicamente, siempre negó las acusaciones.