Las amenazas de bombas en las instituciones educativas se volvieron una costumbre. Cuando la brigada de explosivos llega a las centros educativos no hay nada, pero el simulacro demanda tiempo y dinero, ni hablar de los problemas en el transito que se generan al cortar las calles. En los meses que lleva el 2018 ya se han registrado 98 amenazas de bomba en las distintas escuelas.
Con el objetivo de frenar estas irresponsabilidades de los alumnos, quienes son los apuntados como autores, diputados ingresó in el recinto un proyecto que ayudaría a frenar esto. El objetivo de esto es generar un sistema registral de los números de los chips que se venden en los kioscos, ya que estiman que de esta manera realizan las denuncias y luego los desechan por su bajo costo. Además de tomarle el número de DNI al comprador.