Según un estudio impulsado por el Instituto Nacional de la Yerba Mate, algunos de sus componentes tienen efectos positivos en la densidad mineral ósea.
El Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) impulsó una investigación destinada a establecer si existe una relación entre el consumo de mate durante la menopausia y el fortalecimiento de la densidad mineral ósea.
Investigaciones previas ya confirmaron que la incorporación del mate a la dieta contribuye a fortalecer la densidad mineral ósea, por el contenido que tiene la yerba mate de ácido clorogénico, rutina y cafeína. Ahora, la investigación llevada a cabo por Lucas Brun, del Consejo de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) e integrante del Laboratorio de Biología Ósea de la Facultad de Ciencias Médicas de Rosario (UNR), busca evidenciar si su consumo también es beneficioso en la menopausia, donde las mujeres experimentan un proceso descalcificación acelerado.
A través de un estudio llamado densitometría ósea, se puede medir cuánto contenido mineral (principalmente calcio) poseen los huesos. Actualmente se están llevando a cabo experimentos en cultivos de células y, según Lucas Brun, “se observó que algunos componentes de la yerba, como el ácido clorogénico y la cafeína, aumentan la viabilidad de las células osteoblásticas”.
Algunas de las conclusiones preliminares indican que hay una mayor densidad mineral ósea a nivel de la columna lumbar y cuello femoral en mujeres post menopáusicas que toman un litro o más de mate por día. Por otro lado, Brun explicó que “si bien se observó un efecto positivo del mate sobre el hueso, este es pequeño, por lo que los efectos que se pudieran observar gracias al mate requieren un consumo prolongado”.
Fuente: Agritotal