La costumbre no es nueva y se impuso con la popularización del microondas. Sin embargo, está viviendo un nuevo resurgimiento.
Tiene muchas ventajas: ya no hay que ir corriendo al supermercado por las noches, ni pedir comida grasosa en el restaurante de al lado: la tendencia se llama “meal prep” y consiste en cocinar los domingos para luego desentenderse del tema durante la semana.
¿Es solo un nuevo nombre? ¿O algo más? La realidad es que eso de ir cocinando con antelación ya lo hacían nuestras abuelas. Sin embargo, lo nuevo es que ahora se piensa más en el concepto “to go”, es decir, en adelantar platos para llevar, por ejemplo, a la oficina.
Además, se le da importancia al balance y a la variedad. La idea de cocinar con antelación tenía que ver antes más con cocinar en gran cantidad y comer luego lo mismo durante dos o tres días. El nuevo concepto es ahora ir preparando platos variados con ingredientes ya precocinados, como fideos, quinoa o carne asada.
Es decir que no se trata de cocinar todos los días algo nuevo, sino de establecer una suerte de sistema de módulos. Un salmón marinado, por ejemplo, se puede emplear primero en una pasta, y luego en unos panqueques. El “pulled pork” o cerdo en tiras puede ser el plato estrella del domingo y ser reciclado luego en unas hamburguesas.
Otra ventaja es que, al cocinar en casa, uno sabe exactamente qué está comiendo, algo imposible de saber en el caso de las comidas ya preparadas o las que se comen fuera, en restaurantes. Esto es importante sobre todo para las personas que hacen dieta o que tienen alergias a determinados ingredientes.
Por eso, el “meal prep” va bien con nuevos conceptos en alimentación como “clean eating”, que consiste en ingerir sólo alimentos naturales. Quienes siguen esta tendencia pueden preparar el domingo una batería de barritas de cereal o llamados “energy balls” de nueces y dátiles. Si uno tuviera que preparar estos alimentos a diario, se volvería loco. Y si se llevan estos snacks ya preparados al trabajo, es menos probable que se caiga en la tentación del chocolate o las galletas.