Sobre el final del encuentro, cuando Argentina todavía no podía vulnerar a Nigeria, las cámaras captaron el momento en el que el entrenador consultó al capitán antes de hacer una modificación.
El estadio del Zenit de San Petersburgo hierve. A pesar de haber redondeado un primer tiempo, Nigeria le empata 1-1 a Argentina y lo deja afuera de la Copa del Mundo. Las agujas del reloj parecen aceleradas. Falta menos de un cuarto de hora para el final del partido. Lionel Messi pasa cerca del banco de argentina y Jorge Sampaoli se le acerca. La escena, captada por la TV y detectada por TyC Sports, prueba el doble comando entre el DT y los referentes en la conducción de la Selección.
El diálogo dura 10 segundos, pero la pregunta, dirigida al capitán, se lee perfectamente en los labios del Zurdo de Casilda. “¿Pongo al Kun?”. Messi asiente levemente, tal vez más astuto, atento a la cercanía de las cámaras. Por algo la Pulga suele taparse la boca al hablar con compañeros, rivales o el árbitro. En España, durante las transmisiones, es muy común que la TV realice la lectura de labios.
El Kun, claro, es Agüero, que efectivamente ingresó al campo a falta de diez minutos para el epílogo. No fue el atacante del Manchester City el que desató el partido: terminó siendo Marcos Rojo, en inusual posición de núnmero 9, el que conectó el centro de Gabriel Mercado para que la Selección avance a octavos de final, instancia en la que se medirá el sábado desde las 11 ante Francia.
No es anormal que el director técnico consulte a sus referentes o, en este caso, a su estrella, sobre una modificación a realizar. En este caso, deja en evidencia el “pacto” entre los futbolistas y el cuerpo técnico para tomar las decisiones a través del “consenso”, una especie de doble comando que nació tras el terremoto que provocó el 0-3 ante Croacia que dejó a la Selección al borde del abismo.
Allí, habían quedado en evidencia las diferencias entre el entrenador y los jugadores, e incluso ciertas rispideces en el seno del cuerpo técnico. En consecuencia, tras una cumbre entre las partes, se llegó a esta solución para encarrilar el tren. Así, por ejemplo, pasó a mejor vida la resistida línea de tres en el fondo. Y volvieron al elenco varios referentes del grupo, como Rojo, Banega, Di María o Higuaín.
Un anticipo de esta nueva metodología se observó en la práctica del último domingo, en la que hasta las redes sociales oficiales de la AFA mostraron el cónclave entre Sampaoli y Mascherano, pizarra de por medio, para definir distintas cuestiones tácticas.
Messi, según también captaron las cámaras, se encargó de la arenga antes del ingreso al campo en el segundo tiempo. Y en un buen gesto para con el DT, fue a saludarlo ante los flashes. “Con el tema de la conducción es muy importante la mirada del futbolista dentro de la cancha para tener en claro qué se va a buscar en cada partido”, declaró Sampaoli post triunfo.
Pues bien, el video certifica el nuevo procedimiento. “¿Pongo al Kun?”, preguntó Sampaoli. El Kun entró. Y, aunque no tuvo incidencia directa en el resultado, Argentina ganó.
