Es, quizá, uno de los iconos del cine de terror más importantes del siglo XX, aunque no todas sus películas fueron populares. Con un balance perfecto entre la crueldad, el humor y la ironía, Chucky siempre será “el muñeco maldito”. Se trata del personaje que debutó en cine hace tres décadas y tuvo un rodaje con poco presupuesto pero mucha imaginación, que inició una saga que tendrá una continuación este año con una serie de TV.
En honor al juguete más popular que nadie jamás querría tener en su casa, te contamos cinco secretos del rodaje de Child’s Play, que se estrenó en Argentina comoChucky: el muñeco diabólico.
A mediados de la década del 80, cuando el género de terror tenía un nicho importante de la audiencia de los cines de los Estados Unidos, el guionista Don Mancini estaba obsesionado con el poder que los avisos de televisión sobre los niños y cómo los urgía a consumir todo lo que veían en pantalla. Con apenas 22 años, conocía bien a la industria porque su padre era publicitario y solía explicarle todos los trucos que se utilizaban a la hora de hacer avisos.
Cuando por casualidad volvió a ver un episodio de la serie The Twilight Zone en la que se hablaba de un ejército de juguetes asesinos, se imaginó el personaje de Chucky.Según confesó en una entrevista de 2017, la inspiración para la fisonomía del muñeco fue la popular franquicia de muñecos llamada Cabbage Patch Kids, que en la Argentina se comercializarían algunos años después como “muñecas pimpollo”.