En el marco del acuerdo bilateral entre Argentina y Japón, se presentó en el país el famoso producto asíatico.
El kilo varía entre los u$s 300 y u$s 500.
A principios de mayo, se conoció la noticia que Argentina empezaría, en julio, a exportar carne ovina y bovina desde la Patagonia a Japón. A su vez, el país asiático importaría carne wagyu. Finalmente, el acuerdo se consumó esta semana con el envío de 200 kilos de carne patagónica. Por su parte, los exportadores japoneses presentaron en el país el exclusivo corte japonés. En el evento, estuvieron presentes tanto el Ministro de Agroindustria argentino, Luis Miguel Etchevehere, como el viceministro de agricultura japonés, Atsushi Nonaka y el embajador de dicho país, Noriteru Fukushima. Además, participaron de la histórica cita empresarios de ambos países, la Organización de Comercio Exterior del Japón y la organización Beef Japan, única autorizada para la exportación de la carne.
La carne wagyu, es una de las más selectas del mundo. Wagyu en japonés significa “res japonesa” y se trata del ganado vacuno autóctono de Japón. El rasgo más característico de este producto es su alto contenido en grasa veteada. Esto, sumado a la gran ternura de sus fibras, hacen que la carne tenga un aroma único y se funda a baja temperatura. El objetivo es logran un punto de maduración y textura ideal, esto se alcanza cuando la res tiene una edad media de 32 meses. Si bien no es difícil de conseguir en Japón, un kilo puede costar entre u$s 300 y u$s 500 dólares, o más incluso.
Un punto importante a tener en cuenta es que no toda carne wagyu es carne de Kobe. Para recibir dicha certificación se debe realizar un sacrificio y tener en cuenta varios criterios muy estrictos. La denominación de origen Kobe solo la pueden obtener reses nacidas, criadas y sacrificadas en la prefectura de Hyogo. De acuerdo con el portal Nutrición y cocina, unas 300 cabezas de ganado de Tajima por año recibe esta certificación. En otras palabras, apenas un 0,16% del consumo anual de carne de vacuno en Japón. De este porcentaje, apenas se exportan 700 toneladas a diferentes países del mundo. Los criterios para obtener la denominación de origen Kobe son:
La res no debe haber sufrido la enfermedad de las vacas locas.
Vaca virgen o buey castrado, siempre de la línea Tajima o res japonesa negra.
Debe ser una res nacida en la región japonesa de Hyogo de una vaca de la misma línea.
La res debe haber sido criada por un granjero con certificación de la misma región.
La res debe haber sido sacrificada por un matadero certificado de la misma región.
El índice de marmoleado debe presentar un valor de 6 o superior.
La calificación del rendimiento debe ser de valor A o B.
El peso bruto del animal (es decir, tras la eliminar la cabeza y las entrañas) debe ser de 470 kg o menor.
Su carne debe ser de textura fina y excelente firmeza.
De momento, parece muy difícil que llegue a la Argentina. Habrá que contentarse con probar la carne wagyu, de por sí es un manjar seleccionado para los paladares más exquisitos