Según los científicos esto demuestra que no se trata de un mineral exótico, sino que, teniendo en cuenta la cantidad, es relativamente común
Hay un enorme tesoro enterrado bajo nuestros pies: más de mil billones de toneladas de diamantes, revelaron esta semana investigadores estadounidenses del Massachusetts Institute of Technology (MIT).
Pero no hay que esperar una avalancha de diamantes. Estos minerales preciosos están ubicados más profundo que lo que cualquier perforación ha llegado jamás, entre 145 y 240 kilómetros por debajo de la superficie de nuestro planeta.
“No podemos llegar a ellos, pero aun así, hay muchos más diamantes que lo que pensábamos hasta ahora”, dijo Ulrich Faul, un científico investigador del Departamento de Ciencias Terrestres, Atmosféricas y Planetarias del MIT.
“Esto demuestra que el diamante no es un mineral exótico, sino que, teniendo en cuenta la cantidad, es relativamente común”, agregó.
Usando tecnología sísmica para analizar cómo las ondas sonoras atraviesan la Tierra, los científicos detectaron el tesoro en rocas llamadas raíces cratónicas, cuya forma es similar a la de montañas invertidas ubicadas entre la corteza y el manto terrestre.
Estos son “los más antiguos e inmóviles sectores de rocas que están por debajo de la parte central de muchas placas tectónicas continentales”, explicó el MIT en un comunicado.
El proyecto para descubrir los diamantes profundos de la Tierra se inició porque los científicos quedaron desconcertados cuando las ondas sonoras se aceleraban significativamente al atravesar las antiguas raíces cratónicas.
Entonces, ensamblaron rocas virtuales con varias combinaciones de minerales, para calcular cuán rápido podían viajar las ondas sonoras a través de ellas.
“Los diamantes son especiales en muchos sentidos“, dijo Faul. “Una de sus propiedades particulares es que la velocidad del sonido a través del diamante es más del doble de rápida que en el olivino, el mineral dominante en las rocas del manto superior”, explicó.