Tomo duchas y cierro la canilla cuando estoy enjabonándome. No uso la bañera.
Cuando me cepillo los dientes cierro el grifo. Y uso un vaso para enjuagarme la boca. Así ahorro 15 litros de agua potable.
Ahorro agua colocando una botella llena de líquido y bien cerrada en la mochila del inodoro. Ese mecanismo reduce la capacidad contenida y al apretar el botón sale menos agua.
Limpio las frutas y las verduras en un recipiente grande para reutilizar el agua después, por ejemplo para regar las plantas.
Lavo los platos en secuencia, primero pasan por el detergente y luego por el enjuague. Se puede lavar con agua recolectada como la de las frutas y verduras.
Procuro llenar el lavarropas para aprovechar bien cada lavado.
Cosecho agua para lavar los pisos y regar las plantas.
Llevo el auto a un lavadero porque con las hidrolavadoras se gasta menos agua. Pero si lo hago en casa uso un balde, no una manguera.
Arreglo las pérdidas de agua de mi hogar apenas aparecen.
Instalo equipos automáticos para ahorrar más agua. No son costosos.