El pueblo de Candioti (20 kilómetros al norte de Santa Fe) vive sus horas más revolucionadas en un caso por el cual vecinos cortaron la RN 11.
Vladimir es un nene de 8 años fruto de un relación de sus padres que no prosperó. Luego de un fallo judicial, el padre reclama la tenencia del chico.
Gerardo Krinisky, padre del menor, dijo en Radio EME que “desde el nacimiento de Vladimir hasta diciembre de 2016 él vivió con su madre”. Los problemas comenzaron a ser visibles porque “los docentes de la escuela donde asistía notaron abandono de persona y maltrato, sumado a problemas de conducta” del propio Vladimir.
Krinisky dijo que “las autoridades de la escuela estaban por denunciarla (a la madre) en la Subsecretaría de la Niñez y entonces ella lo cambió a la escuela Juan de Garay en Santo Tomé”.
Según el padre, Vladimir sufría castigo físico, dijo que la madre “le quemó las manos en una hornalla” y además le pegaba continuamente con cinto.
Entrevista con Gerardo Krinisky:
Por estas cuestiones, Gerardo Krinisky dijo: “Yo tengo la tenencia provisoria desde el 2 de enero de 2017” y la madre lo visitaba los días martes acompañada por una psicopedagoga.
Un día todo cambió, Krinsky denunció que la madre “rompió una barrera perimetral, se metió en la casa y se quiso llevar al nene. Llamé a la policía y se escapó sola”, relató.
La tarde del jueves 5 de julio “se dictó una sentencia que da tenencia conjunta pero con domicilio en la casa de ella” dijo el padre de Vladimir. “La sentencia está en suspenso hasta que mi abogado no sea notificado”, agregó.
Sin embargo la tenencia compartido no fue así, cuando la madre debía darle el chico a su padre, no apareció. “No lo llevó y no se saben donde están. Se viralizó que se fue de viaje con el nene” dijo el padre y sumó que “existe una captura de pantalla de las redes de la madre que dice ‘de viaje con Vladimir’“.
Así reacciona Vladimir cuando ve a su madre: