Se vende con receta archivada y es solo para uso institucional y hospitalario.
En Argentina se podrá fabricar el fármaco abortivo Misoprostol, para su administración terapéutica exclusivamente institucional y hospitalaria, conforme a los cuatro supuestos de interrupción voluntaria del embarazo no punibles por su Código Penal.
Dicha especialidad medicinal se encuentra autorizada desde el mes de julio pasado, en forma farmacéutica de comprimidos vaginales con una concentración de 200 microgramos, bajo la condición de venta por receta archivada y para uso institucional y hospitalario exclusivo, aclaró la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica de Argentina(Anmat).
La Anmat, responsable de la autorización de la fabricación, informó de que el fármaco se producirá bajo la denominación de producto “Misop 200” y recordó que el Misoprostol, al igual que otras prostaglandinas, produce maduración cervical, dilatación y reblandecimiento del cuello uterino, y disminuyendo la cantidad de fibra de colágeno y permitiendo que se intercale entre ellas una mayor cantidad de agua.
Además, y de forma consecutiva, el Misoprostol aumenta la frecuencia y la intensidad de las contracciones del músculo liso uterino, de forma que las fibras se orientan en el sentido de la tensión ejercida sobre ellas, facilitando así la expulsión del contenido del útero, explicó la Anmat en un comunicado.
Estas propiedades del Misoprostol permiten su utilización en la maduración cervical previa a una histeroscopía, o en otros procedimientos ginecológicos que requieran acceder a la cavidad uterina en la inducción del parto, en la prevención o tratamiento de la hemorragia posparto, o en la interrupción del embarazo en las condiciones establecidas por la legislación vigente en Argentina.