La nueva evidencia complica más la situación de David Nahuel López, el único detenido en la causa, quien en las próximas horas será sometido a pericias psicológicas. Mirá las imágenes.
David Nahuel López, detenido por violar a una nena de 12 años en Marcos Paz, se negó este domingo a declarar y en las próximas horas será sometido a pericias psicológicas.
El joven de 21 años tiene una mordedura en la mano derecha, como lo contó la víctima. La Policía Bonaerense, además, encontró una nueva evidencia que podría complicar aún más la situación del único sospechoso: hallaron el celular de la chica, que el perverso le había robado.
El aparato estaba en un terreno vecino al domicilio del detenido. Sin embargo, no sería la única prueba en su contra. Los investigadores constataron que el hombre tenía en la mano una mordedura, tal como había indicado la chica.
A su vez, cuando la policía entró a su casa, secuestró botas blancas y una campera gris que serían similares a las que utilizó en el ataque, de acuerdo al análisis de las autoridades.
La grabación de las cámaras de seguridad fue un elemento clave en la investigación, ya que gracias a ella pudieron identificarlo. Varios vecinos lo reconocieron y llamaron al 911 para aportar datos. Y así la policía pudo saber que vivía a solo cinco cuadras de la casa de la víctima y que trabajaba en un frigorífico.
Tal como publicamos en la edición de este, las autoridades revelaron que el agresor tenía varios perfiles en Facebook, en donde tenía como contactos a varias adolescentes. Hasta constataron que, el día en que difundieron el video del hecho, escribió: “Que hijo de puta, ¿cuándo van a poner seguridad en Marcos Paz?”.
“Esto es una lección por andar de noche. Me mandó Dios y si vas a una Iglesia contalo. Otro te hubiese matado”. Ese fue el mensaje que le dio el violador a la víctima, una nena de 12 años, después del ataque en un descampado ubicado en Monteagudo y Buenos Aires, en Marcos Paz.
La mamá de la víctima explicó que su hija no estaba acostumbrada a salir a la calle sola y que esa noche se había ido de su casa como “una travesura”. Junto con una amiga, que había ido a cenar con ella, se escaparon para pasear por el centro de la localidad y cuando se hizo de madrugada decidieron volver caminando.
Al llegar a la calle Monteagudo un hombre les pidió la hora y, al mismo tiempo, desde un auto un grupo de personas las invitaron a subir. Fue en ese momento, asustadas y sin saber qué hacer, se separaron.
El violador siguió a la víctima por la misma calle y, tal como se vio en el video, la interceptó y la arrastró de los pelos hasta el descampado. Después del ataque sexual, la obligó a contar hasta 100 sin mirar y le robó el celular. Una vez que el hombre huyó, la chica le pidió ayuda a dos mujeres que pasaban por el lugar y avisaron a la policía.