Lo dispuso el Ministerio de Seguridad, tras consultar a la Justicia; se abonará el 5% de la plata que se logre rescatar, con un límite máximo de $2 millones; la medida rige a partir de hoy.
La Argentina puede consagrar un nuevo millonario en poco tiempo, y esta vez no será por acertar algún número de lotería. A partir de hoy, quien entregue datos concretos que permitan encontrar dinero o bienes que sean producto de los hechos de corrupción que se investigan en la causa de los cuadernos será recompensado por el Ministerio de Seguridad.
Los informantes podrán ganar el 5% de lo que se encuentre, con un máximo de dos millones de pesos. Se trata del primer movimiento formal del Gobierno en la causa, que ya tiene 14 detenidos, 43 imputados y diez arrepentidos.
Según la resolución, la decisión fue del Ministerio de Seguridad, que conduce Patricia Bullrich. La ministra consultó a la fiscalía, que informó, mediante un oficio, “que no existen objeciones que formular al progreso del establecimiento de una recompensa para aquellas personas que, sin haber intervenido en el hecho delictual, aporten datos precisos que conduzcan a la recuperación de dinero, divisas o bienes en el marco de la causa mencionada”.
Así las cosas, ayer a la tarde, Bullrich firmó la resolución. “Ofrécese una recompensa para aquellas personas que aporten datos precisos que conduzcan a la recuperación de dinero, divisas o bienes en el marco de la causa caratulada ?Fernández, Cristina Elizabet y otros s/asociación ilícita'”, dice el primer artículo de la resolución.
La norma establece que el porcentaje que se llevará quien lleve un dato concreto será de 5% del valor recuperado con ese aporte. Pero, a no entusiasmarse: a renglón seguido dice que habrá un tope de dos millones de pesos.
Pero inmediatamente hay una salvedad. “El monto de la recompensa se determinará exclusivamente sobre el dinero o el valor del bien efectivamente recuperado, quedando a criterio del Ministerio de Seguridad la fijación del porcentaje que corresponda al aportante, de acuerdo con la precisión de los datos y su eficacia de cara a la recuperación de dinero, divisas o bienes en el marco de la causa”, dice la resolución.
Los cazadores de indicios que vayan por la recompensa ya tienen un protocolo para hacer su denuncia. Las personas que quieran suministrar datos deberán comunicarse telefónicamente con el Ministerio de Seguridad. Para ese fin estará disponible el número de acceso rápido 134.
A su vez, una vez que la pesquisa tenga resultado positivo, el pago de la recompensa “será realizado en este ministerio o en el lugar que designe el representante de esta cartera de Estado, previo informe del representante de la autoridad interviniente, sobre el mérito de la información aportada”. Hay una garantía más: de acuerdo con lo que se estableció, se preservará la identidad del aportante.
Los últimos párrafos dan las instrucciones para hacer pública la medida. Por un lado, la Secretaría de Comunicaciones del ministerio deberá difundir el llamado; por el otro, las fuerzas de seguridad deberán pegar carteles con las condiciones de la recompensa.
Más de un pago
De acuerdo con lo que se desprende de la norma, podrían darse varias recompensas, ya que no se establece que la recompensa se pagará solamente a quien llegue primero. La letra de la resolución dice que si se recupera algún bien se dispara el pago.
La posibilidad de dar recompensa para esclarecer un delito está normada por la ley 26.538 y se publicó el 28 de octubre de 2010. En el artículo 3 establece que la autoridad de aplicación, en este caso el Ministerio de Seguridad, por sí o por pedido de algún fiscal, hará el ofrecimiento de la recompensa y tendrá a su cargo el pago. Pero la llave para poder requerirla está en el artículo uno de aquella ley. Si bien se enumera una determinada cantidad de delitos en lo que prospera el incentivo, en el último párrafo establece que se aplica a todos “aquellos delitos que, por su gravedad o complejidad, justifiquen la recompensa para el suministro de información”.
La decisión de canjear dinero por pistas suele ser muy utilizada en otros delitos, pero en los que se busque plata de la corrupción es inédito. Los investigadores judiciales están convencidos de que parte de los bolsos de dólares cuyo movimiento y sistema de recaudación se ha relatado en estas últimas dos semanas se podrá recuperar.
Por un lado, confían en la investigación que lleva adelante la Unidad de Información Financiera (UIF) que ya tiene datos concretos de propiedades en Estados Unidos que serían de propiedad de los herederos del secretario privado de Néstor Kirchner, Daniel Muñoz, fallecido en 2016. En ese lote de inmuebles, ubicados en el sur de Florida y en Nueva York, ya hay al menos 65 millones de dólares.
Pero, además, se iniciará una pesquisa en el sur. La Justicia ya tiene elementos suficientes como para considerar que parte del efectivo que se recaudaba terminaba en Santa Cruz. El testimonio de un piloto de confianza de los Kirchner ya está adjuntado a la causa. Allí se detallan varios viajes con aviones oficiales a Río Gallegos, que iban y venían con diferencias de pocas horas y en los que se llevaban bolsos llenos para regresar vacíos. Decenas de historias se cuentan en el sur sobre el destino y la ubicación de dinero en efectivo que habría sido originada en estos ilícitos que ahora se investigan en la Justicia Federal.
Una pregunta que varios se hacían es qué pasará con aquella información que algunos ya aportaron a la Justicia sobre la eventual localización de activos.
Pero cualquier recompensa, por ahora, tiene una limitación. Si eventualmente alguien aporta datos sobre alguna de las propiedades de la expresidenta, pues deberá esperar para saber si el ganador del premio. Por ahora, la política decidió sostener a la expresidenta y ni siquiera se sentó a debatir en el Senado la posibilidad de permitir allanamientos. El Honorable Senado de la Nación será el gran obstáculo que tendrán que pasar los cazadores de fortunas que se animen a contar a la Justicia lo que tantas veces contaron a interlocutores informales.
Fuente: La Nación