A poco más de un mes de un nuevo aniversario del atentado a las Torres Gemelas, la madre del terrorista más famoso del mundo rompió el silencio y habló sobre su hijo.
La madre del ex líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, habló por primera vez y aseguró que su hijo era “un buen chico” pero que le “lavaron el cerebro.
Alia Ghanem concedió una entrevista desde su casa en la ciudad de Yeda, Arabia Saudita, al diario británico The Guardian, a poco más de un mes de que se cumplan 17 años del atentado a las Torres Gemelas que convirtió a Bin Laden en el enemigo público número 1.
“Era un chico tímido y bondadoso que tuvo una vida muy difícil” aseguró Ghanem y advirtió que fue “la gente en la universidad lo cambió”. De acuerdo con la madre del terrorista más famoso del mundo en la universidad Bin Laden “se convirtió en una persona totalmente diferente. La verdad es que era un chico muy bueno hasta que conoció a una gente que, cuando tenía 20 años, le lavó el cerebro”.
Y siguió: “Yo le decía que no se juntara con ellos pero él nunca me admitía lo que hacían realmente porque me amaba mucho”.
Bin Laden estudió Economía en la Universidad Rey Abdulaziz de Yeda. Allí fue donde conoció a Adbullah Azzam, uno de los integrantes de la Hermandad Musulmana, que se convirtió en su consejero espiritual.
Ghanem creció en la ciudad siria de Latakia y se mudó con su familia a Arabia Saudita a mediados de la década del ’50. Cuando Osama, su primer hijo, cumplió tres años se divorció de su esposo y volvió a casarse más tarde.
Según contó a The Guardian pudo ver por última vez a su hijo en 1999, en las inmediaciones de la ciudad afgana de Kandahar. Ese año su familia pudo visitarlo en dos ocasiones y luego de eso ya nunca más lo volvieron a ver.
“Su base estaba cerca del aeropuerto que capturaron de los rusos. Estaba feliz de recibirnos y de enseñarnos todo. Incluso hicimos una fiesta e invitamos a todo el mundo”, recordó Ghanem.
Uno de los hermanos de Osama, Ahmad, asegura que su madre es incapaz de culpar a su primogénito por los atentados a las Torres Gemelas y que responsabiliza a su círculo cercano. “Lo amaba tanto que no es capaz de culparlo. Echa la culpa, sin embargo, a su círculo cercano. Ella sólo conoció a Osama de niño, el que todos vimos, y no llegó a ver su lado yihadista”, dijo.
“Nunca podría haberme llegado a imaginar que se convertiría en yihadista. No quería que sucediera nada de esto. ¿Por qué lo tiraría todo por la borda así?”, se preguntó la madre.