La cuestión es aplicar restricciones hasta los 16 o 18 años de edad
(ANSA) – El gobierno británico evalúa poner límites a la venta de bebidas energéticas para los menores de 16 años, o incluso menores de 18. El ejecutivo de Theresa May, preocupado por los elevados contenidos de azúcar y cafeína de estas bebidas, piensa en imponer fuertes multas -de hasta 2.500 libras, según el Independent- a los comerciantes que no respeten la prohibición.
El anuncio llegó directamente de parte de May y hoy, según los medios británicos, comenzará un período de consultas en el gobierno, de 12 semanas, para decidir sobre todo si imponer las restricciones previstas hasta los 16 o 18 años.
La premier, por su parte, explicó que la consulta se enmarca en la estrategia de Downing Street contra la obesidad infantil, subrayando que el consumo de bebidas energéticas debe ser examinado porque “se venden a precios más bajos que las bebidas sin alcohol”.
El ministro de Salud Pública Steve Brine comentó que en algunos negocios es posible comprar cuatro latas de bebida energética de 250 mililitros cada una por solo una libra. El gobierno propone imponer la prohibición sobre todas las bebidas energéticas que contengan más de 150 miligramos de cafeína por litro.