Un camión con 157 cadáveres fue encontrado en el estado de Jalisco, México, después de que los vecinos denunciaran que sentían mal olor. En dicha región del oeste mexicano los asesinatos del crimen organizado se cuentan de a montones todos los días. Las morgues no dan abasto. Por eso, el camión servía de morgue improvisada.
“¿Cómo es posible?”, se quejaron vecinos de la localidad de Tlajomulco, cerca de la ciudad de Guadalajara, la segunda mayor ciudad de México y ubicada unos 550 kilómetros al noroeste de la capital. “¿Por qué lo andaban paseando en la mañana?”, declaró un comerciante a medios locales. El camión había estado primero en una bodega en la localidad de Tlaquepaque, en las afueras de Guadalajara, pero el lugar fue clausurado el jueves porque se había construido sin permisos. Así que entre el viernes por la tarde y el sábado en la mañana el tráiler fue estacionado en un camino de tierra detrás del barrio Paseos del Valle de Tlajomulco.
“Sí existe ese camión, pero no está abandonado”, dijo un portavoz de la Fiscalía de Jalisco. “Los cuerpos están bajo resguardo”. Después de estar estacionado y ante las quejas de los vecinos, el tráiler fue llevado a instalaciones de la Fiscalía en la calle 14 de Guadalajara.
Que haya cadáveres en camiones refrigerados a modo de morgue no es excepcional en México. Con más de 200.000 muertos en los últimos 12 años (foto de una víctima) y más de 35.000 personas desaparecidas, se usan tráilers en ocasiones para colocar cuerpos a falta de espacio.
Al ser consultados el Instituto Jaliciense de Ciencias Forenses (IJCF) y la Fiscalía se pasaron uno a otro la responsabilidad. “Es asunto de la Fiscalía porque a ella le corresponde determinar el destino final de los cuerpos”, dijeron fuentes del instituto. “Ellos son los que tienen que responder y así es por ley. Ellos son los responsables, ya están construyendo en este momento las criptas para ir a depositar estos cuerpos, inhumarlos ahí, está programado para 800”, dijo el titular del IJCF, Octavio Cotero Bernal, en declaraciones publicadas por el diario local Mural. Cotero afirmó, sin embargo, que las dos instituciones están rebasadas por el número de muertos y por las autopsias que se deben hacer.