Más allá de ser sinónimo de pubertad y adolescencia, el acné también se encuentra presente en la edad adulta.
Si bien su manifestación es más evidente en el rostro, afecta además otras partes del cuerpo, como por ejemplo: la espalda. Un reciente estudio demostró que una serie de anticuerpos pueden reducir la inflamación ligada a las lesiones que provoca el acné, por lo que estaría más cerca de encontrarle una solución a este problema dermatológico.
Pero, ¿a qué se debe exactamente el acné? Se trata de una alteración dermatológica que se manifiesta en forma de inflamación e infecta los poros de la piel en los que existe pelo. Las causas directas de este problema cutáneo son varios, pero hay que remarcar los cambios hormonales, que son los más evidentes sobre todo en la adolescencia. En la adultez puede ser consecuencia directa de desequilibrios hormonales, como la ingesta de anticonceptivos; la menstruación o el embarazo.
Si bien no es un problema serio de salud, suele suponer una complicación a nivel estético al dejar cicatrices. En los casos más extremos, puede ocasionar cuadros de depresión y ansiedad.
¿Una solución en camino? Esta situación podría estar a punto de revertirse, dado que Dermatólogos de la Universidad de California en San Diego y la Universidad Nacional Central de Taiwán realizaron una investigación que confirmó la posible existencia de una vacuna contra el acné.
Su estudio, el cual fue publicado en la revista Journal of Investigative Dermatology, demostró por primera vez que los anticuerpos contra una toxina segregada por bacterias en el acné común pueden reducir la inflamación de las lesiones generadas por esta patología.
La investigación arrojó muy buenos resultados y se trabaja en la idea de realizar una vacuna podría prevenir de forma eficaz la aparición del acné al reducir la respuesta inflamatoria a la toxina. Si los test siguen como hasta, podría plantearse la venta de aquí a dos años de esta vacuna milagrosa.
Opinión. El médico y jefe del servicio de desmatología del Hospital Quirnosalud Valencia, José María Ricart Vayá, indicó que podría convertirse en realidad siempre y cuando haya una evaluación científica. En la actualidad, los tratamientos para tratar el acné mejoraron considerablemente. Kleresca es por ejemplo uno de los que ofrecen resultados muy satisfactorios, y está basado en la terapia biofotónica (uso de luz con fines terapéuticos) y aborda todos los tipos de acné.
En el día a día a su vez, hay pequeños tips que pueden ayudar a limitar la proliferación del acné: no manipular las lesiones inflamatorias; evitar los remedios caseros como las mezclas de limón ya que no han demostrado efectos reales y llevar una dieta saludable y libre de todo tipo de excesos.