El polo comercial cuestiona la remarcación.
En una clara muestra de la enorme profundización de la crisis, las ventas mayoristas del Mercado Central cayeron un 50% en agosto interanual, cuando durante los primeros siete meses del año el derrumbe había sido del 40%, en tanto que la tarifa eléctrica para los puestos subirá un 88% a fin de mes.
Así lo informó a BAE Negocios el presidente de la Cámara de Operadores Mayoristas Frutihortícolas del Mercado Central (Comafru), Fabián Zeta, quien expresó que “las ventas de frutas y verduras bajaron un 50%. Las verdulerías casi no vienen a comprarnos y tampoco colaboran con la coyuntura porque remarcan muchísimo, sin relación con los precios nuestros”. Dentro de los motivos se encuentran: la violenta caída del consumo masivo; y un fuerte desorden en la comercialización, debido a la instalación indiscriminada de puntos de venta directa sin control.
Ante esto último, Zeta advirtió “en el Gran Buenos Aires, existen alrededor de 35 mercados de frutas y verduras, y solamente diez deben ser legales” y agregó que “con el recrudecimiento de la crisis, los puntos ilegales están proliferando y obviamente sin los controles de sanidad”. El directivo no descartó mayor pérdida de empleo hasta fin de año, y en lo que va del año, como informó este medio, se perdieron más de 700 puestos de trabajo.
Por lo mencionado, el sector reclama, por un lado, el congelamiento en el costo de los alquileres de los puestos, y por otro, una reducción de las tarifas de luz. Y para combatir la informalidad, los mayoristas proponen crear un registro de mercados para contar con los controles que garantizan la calidad de los alimentos. “Los gastos que tenemos fijos aumentan y los sueldos de los empleados, también. Todo esto cae sobre el bolsillo del operador”, señaló Zeta.
“Los mercados, no solamente el Central, son contenedores sociales porque alguien que salía de la cárcel agarraba un carro, venía y trabajaba como changarín. Se reinsertaba”, explicó, y agregó: “Esa gente, ahora, no tiene la posibilidad de venir porque sencillamente no hay trabajo. Si a esto le sumamos los trabajadores de las cooperativas y los despidos en el sector privado, son entre mil y 1.200 cesantías”.
Además, Zeta criticó a los comercios minoristas que remarcan con bastante margen con respecto a los precios del mercado mayorista: “Los formadores de precios son influyentes en la economía diaria”. Con respecto a la gravedad de la situación, aseguró que “las ventas cayeron muchísimo y se nota. El que venía siempre, compra menos porque el poder adquisitivo está muy bajo”.
Por otro lado, hizo hincapié en los tarifazos en la luz: “En 2015, había gente que pagaba 2.000 pesos y que, hoy, debe abonar $15.000 o $18.000”. Agregó que “no se gana bien y se está trabajando muy mal.
Los gobiernos nacional y provincial liberan todo y no les importa nada”, concluyó.Por último, pidió que el Mercado Central sea considerado para el abastecimiento del plan “El mercado en tu barrio”.
Fuente: Agritotal