Un kiosko ubicado en 25 de Mayo al 1900, en pleno centro de la ciudad de Santo Tomé, fue el escenario de un robo y posterior persecución que se desató en la noche del martes.
Rodolfo, dueño del local, relató en Radio EME que a las 21.30 ingresó un muchacho encapuchado y con un revolver pidiendo toda la caja, pero “no teníamos nada” porque se estaba haciendo el cambio de turno.
El dueño del kiosko agregó que el ladrón le dijo “quedate tranquilo, dame todo lo que tengas”, mientras le tiraba una bolsa negra para que coloque el dinero que haya.
“Fijate las cámaras, te están mirando y seguro ya llamaron a la policía”, amedrentó Rodolfo al menor de edad que quería robarle. Luego de esas palabras empezó a retroceder y llegó la policía que encerró al Ford Ka en el que se conducían.
Los dos delincuentes, de 16 y 18 años, se dieron a la fuga y fueron detenidos minutos más tarde en barrio Centenario de Santa Fe.