Hoy está en 3,7 reales. De ser así, en dos meses la devaluación de la moneda brasileña será de 30 por ciento.
El futuro ministro de Hacienda brasileño, Paulo Guedes, ya tiene claro cuál será probablemente el valor del dólar cuando comience en su función. Para él “será óptimo que llegue a los 5 reales”. Lo dijo en un encuentro con la prensa, en la puerta de la casa del empresario Paulo Marinho, amigo del presidente electo Jair Bolsonaro. Comentó, en esa misma línea, que “si llega a 5 reales vendo 100.000 millones de dólares de reservas”. Eso indica que la decisión de intervenir en los mercados de cambio, para evitar devaluaciones, recién comenzará a operar a partir de ese valor.
Esto tendrá, sin dudas, repercusiones en la región. Cada movimiento de este tipo de la economía brasileña tiene mucho peso entre sus vecinos. Si se piensa que el dólar está hoy en 3,7 reales, la devaluación sería de 30% en cuestión de dos meses, o sea en cuanto el mandatario electo asuma el comando del Palacio del Planalto, el próximo 1° de enero.
-¿Pero qué hay en los hechos de la venta de los 100 mil millones de dólares de las reservas?, preguntó un periodista brasileño.
-Se habló de una posible venta de 100.000 millones de dólares de las reservas, tomando en cuenta que Brasil tiene casi 400.000 millones. Yo hablé así con el equipo de gobierno: como hace falta un régimen fiscal robusto, no existe la necesidad de cargar tantas reservas porque es muy caro mantenerlas, cuesta mucho. Porque cuando entra dinero de afuera, uno acumula reservas y emite reales. Después uno tiene que emitir deuda interna para esterilizar el efecto de esa emisión de dinero por los dólares que entraron de afuera. Esa deuda tiene un costo que es de 400.000 millones de reales por año (100.000 millones de dólares).
El futuro ministro continuó: “Entonces ¿qué dije? que si esa crisis se agudiza, y lo dije cuando el dólar había llegado a 4,10 reales, si llegara a 5 reales, va a ser muy interesante porque vamos a vender 100.000 millones de dólares de reservas a 5 reales. Eso nos da 500.000 millones de reales. En ese mismo momento que vendemos las reservas vamos a comprar deuda interna. Es una política conocida que se llama de esterilización”.
De acuerdo con su visión de la economía, “si llega a 5, vendo las reservas y reduzco la deuda de 4 billones de reales (un billón de dólares) a 3,5 billones. Y después sigo la vida. Eso ya es un ajuste fiscal en sí. Claro que eso es en un escenario de crisis especulativa. Si hubiera esta crisis, no le tengo ningún miedo. Pueden venir (los inversores) y pueden especular. No tengo miedo. Va a ser óptimo que el dólar llegue a 5, porque voy a reducir dramáticamente la deuda interna. Le vamos a vender dólares a quien quiera comprarlos. Vamos a vender bastante y después reducimos la deuda interna (en 14%)”.
Guedes continuó con la descripción de sus proyectos, al sostener que no tiene hacia el futuro “una meta para el cambio”. Lo verá, entonces, en cada circunstancia. Para él, la venta de las reservas apuntan a subsanar el objetivo fiscal: “Vamos a reducir dramáticamente la deuda interna”, insistió.