Habrá entre 18 y 20 competidoras que serán seleccionadas luego de una serie de pruebas. Todas pilotarán el mismo monoplaza de tipo Fórmula 3 y correrán en circuitos en los que lo hace la Fórmula 1.
Un nuevo campeonato de automóviles reservado a las mujeres, las W Series, se pondrá el marcha el próximo año con el fin de “romper el techo de cristal” y reforzar la participación femenina en los deportes mecánicos, a priori de carácter mixto, pero casi exclusivamente masculinos en la realidad.
Las W Series comenzarán en la primavera boreal con entre 18 y 20 competidoras seleccionadas al término de una serie de pruebas, y pilotarán todas ellas el mismo monoplaza de tipo Fórmula 3, detallan los organizadores en un comunicado.
Las carreras tendrán lugar en un primer momento en Europa, en circuitos que han albergado Grandes Premios de Fórmula 1, según los organizadores, que ambicionan extender la competición a América, Asia y Oceanía.
Este nuevo campeonato cuenta con el apoyo de grandes nombres de la F1, como el antiguo piloto británico David Coulthard, ganador de 13 grandes premios, o del director técnico de Red Bull, Adrian Newey. Estará dotado con 1,5 millones de dólares en premios, de los que medio millón de dólares irán a parar a la ganadora del campeonato.
Los organizadores indicaron su certeza en que las mujeres “pueden participar en igualdad de condiciones con los hombres en los deportes mecánicos”.
La última mujer en haber disputado un Gran Premio de F1 es la italiana Lella Lombardi, en 1976.
“Para ser un buen piloto de carreras hay que ser bueno para ello, determinado, competitivo, valiente y estar físicamente preparado, pero no se necesita una fuerza física extraordinaria como en otros deportes. Tampoco es indispensable ser un hombre”, declara el escocés en el comunicado.
Sin embargo, esta iniciativa no causó un apoyo unánime.
“Qué día triste para los deportes mecánicos”, se lamentó la piloto británica de Indycar Pippa Mann. “Los que aportan dinero para ayudar a las mujeres pilotos eligieron la opción para discriminarlas más que para apoyarlas. Estoy profundamente decepcionada por presenciar un paso atrás histórico”.