La cuarta semana de octubre, que cuenta con una agenda intensa para los funcionarios de Hacienda –el miércoles esperan contar con Dictamen de Comisión en Diputados para el tratamiento del exigente Presupuesto 2019; y el viernes se reúne el directorio del FMI para aprobar el Acuerdo II con la Argentina y habilitar el segundo y tercer desembolso juntos, por unos USD 13.400 millones para fortalecer las arcas del Tesoro argentino– comenzó de la mejor manera: el anuncio de un nuevo sobrecumplimiento de las metas fiscales trimestrales, por séptima vez consecutiva.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, junto a su secretario del área, Rodrigo Pena, y el secretario de Política Económica, Miguel Braun, presentaron los números de la ejecución presupuestaria correspondiente a septiembre, el tercer trimestre y el acumulado del ejercicio, con sendas disminuciones de la brecha negativa entre recursos totales y gastos antes del pago de intereses, pese al cambio del escenario internacional y local que derivó en recesión y más inflación.
Llevamos 15 meses consecutivos con los ingresos creciendo más que los gastos y esa tendencia se va a mantener
Destacó el ministro que había empezado el año con una meta de déficit primario de 3,2% del PBI y se bajó a 2,7% ahora. Los recursos crecieron en septiembre 36,6 y los gastos primarios 26,5%, con lo que el resultado primario se redujo 27,1% nominal. Y en el acumulado de 9 meses el déficit primario se redujo a 1,1% del PBI, bajó 1% del PBI.
“Llevamos 15 meses consecutivos con los ingresos creciendo más que los gastos y esa tendencia se va a mantener, mientras que del gasto ya se ha logrado volver a los niveles de 2012”, resaltó el ministro.
Los recursos crecieron en septiembre 36,6 y los gastos primarios, con lo que el resultado primario se redujo 27,1% nominal
El sobrecumplimiento de las metas fiscales era casi una certeza de cara a fin de año en las últimas presentaciones del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, principalmente motivado por la subejecución de los fondos presupuestados, esto es más por un recorte en el gasto público que por un aumento en los recursos totales, que reflejó una dependencia en saltos extraordinarios, con aportes de la Anses y venta de activos del Estado.
De este modo, el equipo económico logró contrarrestar el contratiempo que había generado la aceleración en septiembre de la inflación a más del 40% a nivel de precios al consumidor, y del 74% en el canal mayorista, cuando en el Acuerdo I con el FMI se había fijado un “criterio de consulta” con una banda superior de 32 por ciento.
Lagarde junto con Dujovne. El cumplimiento de las metas fiscales es la columna principal del programa económico presentado al FMI, se considera clave para desacelerar la inflación (AP)
El Gobierno ahora apunta a cumplir con el objetivo de equilibrio fiscal en 2019 mientras aspira a cerrar este año con un déficit no mayor a 2,6% del PBI. Una de las vías para lograrlo que se consignan desde el Gobierno, además de recurrir a medidas adicionales de recortes en el gasto presupuestado y mayor recaudación usando medidas como retenciones a las exportaciones, es que no todo el gasto presupuestado sea finalmente ejecutado.
Primeros datos de octubre
En la primera mitad de octubre se afirmó la política de contención del gasto. La página de Presupuesto Abierto del Ministerio de Hacienda refleja una ejecución del 75,55% del gasto presupuestado ampliado para el año (el Presupuesto que fue modificado en $152.800 millones desde el aprobado inicialmente).
El sitio también indica que la evolución de ingresos fiscales mantiene un ritmo más elevado que el de los gastos, al ya haberse recaudado un 84,83% de lo planeado.