Un grupo de científicos ha descubierto en Ecuador cuatro nuevas especies de insectos acuáticos Atanatolica, del orden de los tricópteros, conocidos por tener numerosas funciones ecológicas en los ríos y por su alta sensibilidad a los cambios en la calidad del agua.
Una de las nuevas especies, la Atanatolica andina, vive en zonas elevadas y sus muestras fueron recolectadas en el Parque Nacional Cayambe-Coca, en la provincia ecuatoriana de Napo, y en el Parque Nacional Sangay, en la de Chimborazo, informó el Instituto Nacional de Biodiversidad (INABIO) de Ecuador.
Asimismo, otra de las nuevas especies, la Atanatolica decouxi, ha sido hallada en el Bosque Protector de los Cedros, en la provincia de Imbabura y, según un comunicado de ese instituto, “no se encuentra en ninguna otra parte ni de Ecuador ni del mundo”.
Ese bosque está altamente amenazado por la minería y la deforestación, y por ello la nueva especie ha recibido el nombre de quién hace décadas protege ese entorno natural, José DeCoux.
Las otras dos, Atanatolica angulata y Atanatolica curvata, fueron encontradas en la provincia de Napo.
Los tricópteros son un orden de insectos de metamorfosis completa emparentados con los lepidópteros, que viven en las fuentes de agua y constan de muchísimas especies endémicas que hasta ahora son desconocidas en Ecuador.
La investigación ha sido realizada por dos expertos de la Universidad de Minnesota, Ernesto Rázuri-Gonzales y Ralph W. Holzenthan, así como por Blanca Ríos Touma, investigadora asociada del INABIO y docente de la Universidad de las Américas (UDLA).
En un artículo publicado en la revista científica ZooKeys destacan que las nuevas especies constituyen nuevas versiones del género neotropical en la familia Leptoceridae de cuernos largos.
“Hay catorce especies de Atanatolica conocidas en las zonas norte y centro de los países andinos (Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, y Bolivia); ninguna conocida en la parte sur de los Andes (Chile, Argentina)”, indica la revista especializada.
También existen cuatro en Brasil, dos en Centroamérica y una en las Antillas.
En Ecuador ya habían sido detectadas otras tres especies de Atanatolica: acuminata, cotopaxi y manabi, según la revista.
El INABIO subraya que “el estudio y la protección de los ecosistemas acuáticos de Ecuador debería ser una prioridad, debido a todos los servicios ecosistémicos que brindan a las poblaciones del país” y también porque “la biodiversidad de agua dulce es la más amenazada del mundo”.
Con información de EFE