El realizador de uno de los films más sensuales y polémicos de la historia del cine falleció en Roma a los 77 años de edad
El director de cine italiano Bernardo Bertolucci, realizador de títulos emblemáticos del séptimo arte como Último Tango en Paris (Last tango in Paris, 1972) Novecento (1976) o El Último Emperador (The Last Emperor, 1987) falleció en la ciudad de Roma. Tenía “solo” 77 años.
Poeta, productor, guionista y director, Bertolucci era considerado como el último “gran maestro” del cine italiano; y tenía justificativos para ello ya que El Último Emperador ganó nada menos que nueve premios Oscar en 1988, entre ellos mejor película, director y guión.
Bertolucci nació en Parma (al norte de Italia) el 16 de marzo de 1941, en una familia de reconocidos escritores y cineastas italianos. De esta manera, entró en el mundo del cine con sólo veinte años de la mano de Pier Paolo Pasolini, a quien asistió durante el rodaje de Accattone (1961).
Sus obras se caracterizaron principalmente por no generar indiferentes en el público y la crítica. Su film más famoso, (1972) Último Tango en Paris, una tormentosa historia de amor protagonizada por una muy joven Maria Schneider y un maduro Marlon Brando fue censurada en países como España o la Argentina. Entre los numerosos premios que recibió fue galardonado con el León de Oro a la carrera en el Festival de Venecia en 2007 y la Palma de Oro honoraria en el Festival de Cannes en 2011.
Su primera producción cinematográfica fue “La commare seca” (1962), poniendo así el punto de partida a una fulgurante carrera como cineasta que le ha situado entre los más importantes de la historia italiana, siembre en búsqueda del intimismo y en continuo análisis de la juventud.
Tras esta cinta dirigió “Prima della rivoluzione” (1964) o “Il conformista” (1970), obras con las que se consagró como un director que trabajaba en la introspección de sus personajes.
Su carrera internacional despegó con Último Tango en Paris que le supuso dos nominaciones al Premio Óscar como Mejor Director y Mejor Actor en 1973 y, en ese mismo año, también recibió otras dos nominaciones en los Globos de Oro, a la Mejor Película y al Mejor director.
No consiguió ninguno de estos galardones, pero Bertolucci ya se había situado en la primera plana del cine internacional.
Continuó su éxito internacional con Novecento (1974-1976), dividida en dos actos, que retrata la vida campesina de la Italia de la Gran Guerra y del fascismo.
Seis años después, en 1993, estrenó otra recordada producción, Pequeño Buda (Little Buddha), la historia de un niño estadounidense en quien unos monjes budistas creen ver la reencarnación de uno de sus lamas.
En 2003 dirigió Los Soñadores (The Dreamers), tras la que se vio obligado a quedar postrado en silla de ruedas por un grave problema en la espalda.
Su última película es de 2012, “Io e Te”, en el que volvió a tratar el tema de los jóvenes.