Una heladería de barrio Los Hornos fue epicentro para que un delincuente ingrese y a punta de pistola se lleve todo el efectivo que había en el lugar.
El atardecer del lunes no fue romántico para el empleado de la heladería ubicada en Diagonal Goyena y San Lorenzo, un ladrón ingresó minutos después de las 19 haciéndose pasar por un cliente.
Las intenciones de compra duraron pocos segundos ya que al acercarse al mostrador sacó una pistola escondida en su cintura y apuntó a quien atendía al público exigiendo que le entregue el dinero que había en la caja.
El empleado de la firma no se resistió y entregó hasta las monedas para luego accionar el botón de pánico pero ese movimiento fue en vano.
La policía comunitaria informó que desde la comisaría sexta no había móviles y no asistirían al lugar y que si querían, desde la heladería debían ir hasta la dependencia policial a radicar la denuncia.
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