No le gustó la traducción simultánea y lo dijo públicamente. El hombre no tiene filtros
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, hizo uino de sus actos sin filtro y armó su primer berrinche en el G20 minutos después de pisar la Casa Rosada.
Se enojó con la traducción oficial que había y tiró al piso el audífono con el que escuchaba las palabras de Mauricio Macri.
“Entendí mejor en su idioma que a través de la interpretación”, dijo, y el traductor se debe haber querido morir por el maltrato