De “absoluto vandalismo” calificaron arqueólogos la perforación de un agujero en una piedra del Círculo de Stonehenge, el conjunto megalítico cuya antigüedad se calcula en seis mil años en el Reino Unido.
Los restos del monumento, edificado por personas que vivieron entre finales del Neolítico y principios de la Era de los Metales, sufrieron “daños irreparables” a manos de trabajadores de la compañía Highways England como parte de los preparativos para la construcción de un túnel de cuatro sendas que pasará por debajo de Stonehenge.
“Desde 2005 hemos estado excavando en el área con sumo cuidado, a veces usando cepillos de dientes, para que vengan ahora con un taladro de mano y atraviesen la superficie“, dijo David Jacques, arqueólogo principal de Blick Mead, una zona de roca caliza que nunca se congela a una milla de Stonehenge.
Los arqueólogos exploran el área en busca de pistas para explicar cómo y por qué fue construido el monumento de Stonehenge en la planicie de Salisbury, 130 kilómetros al oeste de Londres, en un lapso de aproximadamente 16 siglos.
Sin embargo, representantes de la compañía estatal Highways England aseguran que no hay motivos para alarmarse.
“Los bloques de piedra arqueológicos no sufrieron ningún daño“, dijo un portavoz de la firma. “Hasta ahora nuestras evaluaciones indican que la construcción del túnel no tendrá efectos significativos en Blick Mead, y que las obras se han realizado de una forma altamente profesional, con un arqueólogo in situ y con el debido cuidado en todo momento”.
Sin embargo, el Museo de Amesbury, que promueve la conservación de sitios de importancia histórica en el área de Blick Mead, dijo que la acción de los trabajadores de Highways England era “una destrucción increíble y negligente“.