Gustavo Oroño, referente de pescadores y ONG barriales, está encadenado en la Casa de Gobierno repitiendo la protesta que hubo en el Ministerio de la Producción la semana pasada.
Con una casa gris cerrada por el asueto administrativo del 31 de diciembre, los pescadores llegaron con sus pancartas y reclamos que rezan: “Justicia por los referentes sociales asesinados” y “Gobernador: Los pibes de los barrios tienen ‘hambre'”.
El punto de inflexión es porque “hace 7 años no actualizan el Fondo de Reconversión Pesquera, el pescador se está cagando de hambre en la costa. Este gobierno fracasó en sus políticas para los pescadores”, dijo el encadenado.
“Queremos que se trate a los pescadores como corresponde, estamos acostubmrados a las luchas largas”, cerró.
Los pescadores recibieron como propuesta una reunión para el jueves 3 de enero. El conflicto continúa.