Por efecto de la devaluación, que redujo los salarios en dólares mucho más que la cotización de las propiedades en la misma moneda, prácticamente se duplicó el esfuerzo salarial para acceder a una vivienda.
En octubre de 2017, cuando el metro cuadrado de un departamento usado de unos 60 metros, en Capital Federal, en un barrio de precio medio, costaba U$S 2.205 (mientras el dolar valía $ 18), eran necesarios 1,53 salarios para comprar cada uno de esos m2. Este año, en el mismo mes, se necesitaron 2,7 sueldos para acceder a la misma porción de esa propiedad.
El cálculo fue estimado en base a los datos de Reporte Inmobiliario sobre el valor promedio del m2 de la propiedad y las remuneraciones medias de asalariados del sector privado, publicadas por el Ministerio de Trabajo.
El precio del metro cuadrado de una propiedad de esas características pasó a ser U$S 2.349 en octubre de este año. Multiplicado por la cotización del dólar del viernes pasado ($ 38,56) y luego dividido por el salario medio de $33.590, según los datos oficiales, da como resultado un aumento del 76% en el esfuerzo salarial para la compra.
Germán Rozados, analista de Reporte Inmobiliario, explica que el “crecimiento enorme del esfuerzo salarial, se debe a la devaluación de la moneda que deterioró el poder de compra y al sostenimiento del precio de las propiedades en dolares”, afirmó.
Si bien, según publicó Clarín hace una semana, los precios de las propiedades medidos en dólares tuvieron un retroceso del 10% según indican las escrituras, la tendencia hacia la baja es bastante resistida por el mercado. Algo que no ocurre con los salarios. La remuneración media, en dólares, en octubre de 2017 era de U$S 1.367 y un año después -tras la devaluación- se convirtió en el equivalente a U$S 871.
Un reciente informe de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) que también midió el poder de compra real sobre los departamentos, concluyó que “los salarios medidos en dólares cayeron en mayor proporción al incremento experimentado por los precios de los departamentos nuevos y usados, continuando el deterioro del poder adquisitivo en término de vivienda”.
Según estos datos, en octubre de este año, el salario pudo comprar el 22,6% de un metro cuadrado en la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires, proporción inferior a la registrada en el mismo mes del 2017, cuando alcanzó al 40,2%. En el caso de las viviendas usadas, esos datos fueron del 25,7% y 46,6% respectivamente.
Según la información de la UADE, al comparar con los niveles de octubre de 2017 se observó que el índice de salario nominal medido en dólares se redujo 41,6% interanual. A su vez, el índice del valor del M2 promedio de los departamentos nuevos aumentó 4,7% en la misma moneda y el correspondiente a los departamentos usados lo hizo en 6,3%. En el período analizado el tipo de cambio nominal aumentó 112,7%, según datos del BCRA “, consignó el informe.
Finalmente, otros cálculos que realizó la firma Properati , cruzando los valores de las propiedades con el salario mínimo vital y móvil, según la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), arrojaron un esfuerzo salarial similar. En este caso, el resultado fue el siguiente: en diciembre de 2018, cuando el valor promedio del m2 en CABA era de U$S 2.810, se necesitaban 9,5 salarios, frente a los 5,5 que se requerían para comprar un m2, un año antes. Es decir que el esfuerzo salarial, para esta franja de trabajadores, aumentó 74,34% en el mismo lapso.