La policía corroboró que el aparato no tiene el chip que aporta información sobre contactos y comunicaciones. La mujer desapareció hace seis días.
Una vecina de Berisso le entregó a la policía un celular que le perteneció a Gissella Solís, la mujer que desapareció hace una semana tras pelearse con su pareja porque el hombre tenía una doble vida.
La odontóloga de 47 años desapareció tras una cena dramática en la que le dio un últimatum a su pareja, Abel Casimiro Campos, porque el hombre se negaba a dejar a su esposa, que viven en Lobería, provincia de Buenos Aires.
Este martes la policía confirmó que el celular aportado por una vecina de Solís le perteneció a la mujer, pero no tiene el chip correspondiente en su interior, por lo que no contiene información de contactos y comunicaciones.
Campos se quitó la vida justo antes de prestar declaración indagatoria para revelar sobre qué hablaron y qué pasó en ese último encuentro.
Peritos de la policía Bonaerense realizaron este martes un rastrillaje por una zona de campos enmarañados y en el arroyo Rodríguez a la altura del kilómetro 47 de la Autopista Buenos Aires – La Plata.
El arroyo Rodríguez tiene 6 kilómetros de extensión y una altura de no más de 50 centímetros, lo que sugiere, junto a las características climáticas recientes, que si alguien hubiese descartado un cuerpo en ese sitio el mismo seguiría a la vista, informó el canal C5N.
El rastrillaje se realizó a pie a no más de 3 kilómetros de La Plata, en una zona donde el campo se presenta “salvaje” y por ende no se puede avanzar en un vehículo. Los investigadores creen que una persona debería conocer muy bien el terreno para internarse a dejar un cuerpo.
La fiscalía ordenó hacer el rastrillaje en ese sitio porque un familiar de Solís afirmó que la buscaron por ahí porque Campos vive cerca del campo y del arroyo en cuestión. Pero ahora la Justicia tiene elementos para descartar la hipótesis.
Además habría una filmación en la que se ve la camioneta de Campos en la zona de Bradsen, a 40 kilómetros de La Plata.