Las fuertes tormentas registradas en el norte de Santa Fe, junto al agua en superficie que escurre desde Santiago del Estero y Chaco, dejaron anegadas más de 200 mil hectáreas de campo en los departamentos santafesinos de Vera y 9 de Julio. Todo esto paralizó la campaña de algodón, soja y girasol, y derivó en importantes pérdidas productivas.
Funcionarios del Ministerio de la Producción de Santa Fe volvieron a relevar en las últimas horas la situación hídrica en superficie en comunas afectadas como Las Gamas, Villa Minetti, El Nochero, Santa Margarita, Los Amores, Cañada Ombú y Los Tábanos. El objetivo es elevar un detallado informe a la titular del área, Alicia Ciciliani, quien en las últimas horas en su cuenta personal de Twitter anunció que el gobierno provincial declarará la emergencia agropecuaria para ambos Departamentos, y permitir de esa manera la asistencia a los productores.
Lorena Fortonani, Subsecretaria de Agricultura del gobierno de Santa Fe, indicó a Infobae que “independientemente de los informes que aportan las imágenes satelitales, debemos corroborar la situación en el lugar y entendemos que son unas 200 mil hectáreas las afectadas como consecuencia del exceso de agua en superficie que provocaron las intensas lluvias registradas en las últimas dos semanas”.
“Esta área es algo que tenemos que verificar, ya que podría ser algo más. La zona norte del Departamento de 9 de Julio es la zona más afectada en cuanto al agua, y donde hay más familias damnificadas. Allí están trabajando desde hace 15 días equipos técnicos de la provincia, conformados por un grupo de ingenieros agrónomos, junto a técnicos del INTA y de entidades como la Cooperativa Avellaneda que brindan información”, explicó la funcionaria provincial.
Acciones
Fortonani indicó que entre las producciones más afectadas se encuentra el algodón, que es una de “las más golpeadas”, aunque también se han constatado daños en lotes de soja y girasol. Allí la problemática es que no se pueden levantar los cultivos, algo que estamos evaluando”, dijo.
Desde el ámbito oficial como también desde la producción se mantiene la incertidumbre que ofrecen los excesos hídricos constatados y la posibilidad de escurrir el agua en superficie a partir de los pronósticos climáticos que advierten la posibilidad de que continúen las lluvias en estas zonas durante los próximos días.
La Subsecretaria de Agricultura provincial comentó que se buscará acelerar los trabajos de limpieza de canales para facilitar el escurrimiento de agua, algo que quedará en manos de Vialidad Provincial, y también mantener los servicios de asistencia a los damnificados por las inundaciones, con la provisión de alimentos, ropas o colchones por parte de Protección Civil a las familias inundadas.
Según advirtieron representantes del ámbito privado, la situación que ofrece la inundación de campos se muestra como “preocupante”, ya que se esperaba una campaña excelente, puntualmente en el caso del algodón, hecho que motivó la concreción de fuertes inversiones en la zona, tal como impulsó la Unión Agrícola de Avellaneda, pero la inundación de campos y caminos rurales dificulta el acceso a los lotes que podrían ser cultivados.
