La adolescente de 17 años fue asesinada en la localidad santafesina de Esperanza. La autopsia reveló que el atacante cubrió su cuerpo con tierra mientras seguía con vida, aunque con graves lesiones como consecuencia de golpes en el rostro.
Pese a dos causas por violencia de género , ninguna alerta se disparó alrededor de Pablo Trionfini, el hombre que se suicidó al ser rodeado por la policía como presunto autor de la muerte de la adolescente Agustina Imvinkelried, en la localidad santafesina de Esperanza.
Trionfini fue captado por el sistema de videovigilancia del municipio conversando con la joven, después de que ella saliera del boliche. Incluso, en las imágenes se la ve caminando hacia la ruta. En esas grabaciones se veían con claridad los rasgos de Trionfini, por lo que pudo ser identificado, y luego dos testigos aseguran que los vieron conversando con la joven de 17 años.
Trionfini tenía 39 años y era empleado de la municipalidad de Esperanza. No tenía un prontuario con antecedentes penales, pero cargaba con dos denuncias por violencia de género que presentó -según confirmó la fiscal María Laura Urquiza- su expareja. ” Tenía dos causas en trámite. Las había realizado una pareja de él, una por amenaza simple y otra por desobediencia a un mandato judicial”, explicó la integrante del Ministerio Público de la Acusación.
La intendenta de Esperanza, Ana María Meiners, admitió que desconocían en la comuna que Trionfini tenía antecedentes por violencia de género. “Esto nos demuestra una vez más en qué estado está la sociedad. Tenemos que poner más énfasis en todo esto”, reflexionó la intendenta.
Alfredo Trionfini, hermano del principal sospechoso del crimen, es su secretario de la Producción en la municipalidad.
Pablo Trionfini se desempeñaba como recolector de residuos en el municipio. Estaba por finalizar los trámites de su divorcio con su expareja, quien fue la que lo denunció en dos oportunidades, pero ninguna alerta se activó que pudiera evitar que este hombre, con antecedentes por violencia de género, asesinara salvajemente a una joven de 17 años.
Los detalles de la autopsia del femicidio de la adolescente, quien fue encontrada muerta en una zanja, son escalofriantes. El principal sospechoso del crimen la habría arrojado aún con vida y luego tapó su cuerpo con tierra. Ante una inminente detención Trionfini se suicidó en su casa, donde se colgó con una soga de una viga del techo, mientras la policía esperaba la orden judicial para ingresar al domicilio.
La autopsia reveló que Trionfini arrojó a una zanja a Agustina después de golpearla salvajemente, donde fue encontrada muerta. Los investigadores sospechan que el asesino supuso que la joven de 17 años estaba muerta, pero la víctima aún seguía con vida.
Luego fue a buscar una pala a la casa de un vecino y tapó el cuerpo con tierra y ramas. En los pulmones de Agustina los peritos hallaron tierra, por lo que se estimó que estaba viva cuando Trionfini la arrojó a la zanja, ubicada a unas 18 cuadras del boliche Teos, donde había ido esa noche. Agustina murió a causa de los fuertes golpes que le habría dado Trionfini, pero no se encontraron rastros de violación en su cuerpo.
Fuente: La Nación