El presidente Mauricio Macri arribó de forma sorpresiva un club de Rosario este miércoles a la mañana, antes de seguir viaje hacia la planta de Renova ubicada en Timbúes.
El jefe de Estado llegó al predio sobre Barra, entre Montevideo y Pellegrini, a las 9.45 y bajó de un helicóptero celeste y blanco. De allí, se trasladó en camioneta para encontrarse con un vecino de barrio Belgrano.
Macri fue rodeado de un discreto operativo de seguridad. Apenas tres camionetas de Gendarmería, una ambulancia del Sies y un camión de los Bomberos, que sorprendieron a los vecinos.
En las canchas de fútbol de esa manzana juegan las inferiores del club Río Negro. Si bien no hubo información oficial de la actividad del presidente en la zona, se trasladó en una camioneta blanca que lo esperaba en ese predio y visitó un segundo lugar.
En principio tuvo un mano a mano con un vecino, encuentros que suelen producirse desde Presidencia de la Nación y que más tarde se difunden vía redes sociales. La visita sorpresa busca evitar actos de reclamo o escraches.
“Me dijeron que algo iba a pasar pero ni pensé que iba a ser el presidente de la Nación. Sorprendido”, contó el casero del club. Relató que se fue 20 minutos del club, volvió y partió rumbo a Timbúes.
*Macri se dirigió luego al taller de Leo Aragües, un emprendedor rosarino que creó el primer kayak desarmable del país y que este miércoles recibió la visita sorpresa del presidente de la Nación.