La producción global de carne se expandirá de nuevo en 2019, aunque el ritmo de crecimiento será más lento. Así lo señaló un análisis realizado por el banco holandés Rabobank.
Según el estudio, el panorama para los diferentes países será diferente, aunque en rasgos generales la expansión estará por debajo del promedio de los últimos cinco años luego de un 2018 que cerró con un aumento de la producción superior a la prevista.
Es así que para Estados Unidos se proyecta un crecimiento del 8% en relación a 2018. A diferencia, en China, la producción se mantendrá o disminuirá marginalmente, ya que la demanda interna será cubierta por las importaciones.
En cuanto a Australia, la faena de hembras y ovejas el año pasado limitó la capacidad productiva del rodeo australiano en 2019. El aumento de la lluvia será clave para una recuperación del stock vacuno.
En Brasil las exportaciones de carne al cierre de 2018 superaron más del 10% los niveles de 2017. Para este año se espera que las exportaciones aumenten 4% interanual. Algo similar sucede en Argentina, ya que el ciclo anterior la producción de carne vacuna aumentó rápidamente, por lo que se espera la misma tendencia para este año.