El 26 de Marzo se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino. En nuestro país, cada día 14 mujeres conocen su diagnóstico de cáncer de cuello uterino y otras 5 mueren por esta causa. En lo que va del año murieron 425 mujeres y al finalizarlo serán 1900.
El Virus del Papiloma Humano (VPH o HPV por su siglas en inglés) es el causante del 100% de casos de cáncer cérvico uterino. Se calcula que 8 de cada 10 personas sexualmente activas tuvo o tendrá contacto con algún tipo de VPH alguna vez en su vida. En la mayoría de los casos el organismo controla la infección. Sólo un pequeño porcentaje, causados genotipos de alto riesgo, pueden evolucionar a lesiones precancerosas o cáncer. El cáncer cérvico uterino afecta principalmente a mujeres pobres, con bajo nivel educativo y cuya cobertura de salud es en el sistema público. Muchas de ellas no saben que existe una prueba para detectarlo o tienen dificultades de acceso al sistema de salud.
En este marco, quizás podemos entender por qué estamos frente a un problema de salud pública. Un problema forzado por inequidades al que se debe dar respuesta con la promoción de derechos. La vacunación contra el VPH puede prevenir un 80% de los casos de cáncer cervicouterino. Vacunarse no es privilegio, es un derecho y una responsabilidad que nos iguala.Todos los niños y niñas de 11 años pueden acceder a la vacuna gratuita en todos los centros de salud y vacunatorios del país. Acceder a la vacuna contra el VPH es ejercer el derecho a la salud. Está en nuestras manos la posibilidad de torcer el rumbo del cáncer cervicouterino.